Yeray Álvarez no levanta cabeza desde que el Athletic regresó de vacaciones. En realidad, terminó lesionado la campaña anterior y acudió a la pretemporada con problemas que, además de impedirle trabajar con normalidad, le mantienen alejado de la competición. Ayer se supo que su indisponibilidad se va a prolongar. El servicio médico del club informó que acusa una "reagudización de la tendinopatía en el tendón rotuliano izquierdo", sin precisar qué plazos necesitará para recibir el alta. La nota del club añade que el defensa central no participa "en la dinámica del grupo", que se le realizarán pruebas complementarias y que "se instauran los tratamientos precisos para su recuperación".

La situación que plantea la baja de Yeray implica en principio que Dani Vivian continuará sumando minutos. El recién incorporado a la disciplina del equipo después de consumir el pasado curso cedido en el Mirandésedido en el Mirandés, se ha ganado el derecho a ser titular según el criterio de Marcelino García. Vivian fue el jugador de campo más utilizado en los amistosos y cuando se supo que Yeray quedaba descartado para el estreno liguero en Elche se dio por sentado que entraría en el once, al lado de Iñigo Martínez. Así ocurrió y cinco días después frente al Barcelona, el técnico repitió la apuesta.

El comportamiento de Vivian en sus primeras actuaciones en la categoría ha merecido el aplauso general y no se atisban argumentos para que Marcelino modifique su idea de cara a la cita del fin de semana en Balaídos. Lo significativo de la presencia de Vivian en la zaga es que ha desplazado a Unai Nuñez, recambio habitual de la pareja Yeray-Iñigo estos años. Las razones que el entrenador maneja no han trascendido, pero lo cierto es que mientras Nuñez ha asistido a las dos primeras jornadas desde el banquillo, el nuevo sustituto de Yeray ha dado un gran paso adelante.

Elucubrar sobre el futuro de Vivian entraña su riesgo, pero al menos en el corto plazo parece que seguirá gozando de la confianza del míster. Lo que vaya a ocurrir más adelante dependerá del estado físico de Yeray, pero también del nivel que él ofrece, de si despliega con similar eficacia y con la regularidad requerida las prestaciones apuntadas. Al fin y al cabo, hablamos de un recién aterrizado y no es fácil responder al reto de asentarse en el peldaño más alto.

SE VEÍA VENIR

Concretada pues la solución inmediata a la baja de Yeray, conviene poner el foco sobre el contratiempo que ha dejado fuera de servicio a uno de los favoritos de Marcelino. Para afirmar que se veía venir una noticia del tipo de la anunciada hace unas horas no es preciso ser adivino. Basta con hacer una cronología desde el 7 de julio para concluir que Yeray arrastra una merma para la que no se ha hallado remedio. El servicio médico comentó entonces que sufría unas molestias, que no había resuelto del todo una dolencia detectada en la liga anterior, pese a que por ejemplo intervino en los dos partidos que cerraron el calendario.

Diez días después del parte, jugó 25 minutos en la primera prueba, ante el St. Gallen. El 20 de julio dispuso de la segunda mitad completa ante el Dinamo de Kiev y el 24 jugó de salida contra el Borussia Dortmund, pero sobre la media hora pidió el cambio. Un mal gesto para evitar un gol le sacó del césped. El alcance de la lesión se expresó con el siguiente diagnóstico: "molestias en el tendón rotuliano izquierdo".

Ayer hizo un mes desde su última aparición, pero en este período han pasado más cosas. Su nombre se incluyó en la lista de desplazados al doble compromiso en Inglaterra, donde el entrenador había previsto efectuar el ensayo general de cara a la liga, pero Yeray volvió a Bilbao sin pisar la hierba. Aunque todo indicaba que era complicado que llegase al estreno del campeonato, en las vísperas se especuló con ello, no en vano es un fijo en la pizarra del asturiano. La débil expectativa de verle en acción en el Martínez Valero, en parte alimentada por la falta de pronunciamiento del club en torno al momento del jugador, se extinguió al salir la relación de convocados. Ayer mismo, una semana más tarde, se ha hecho público lo que tiene Yeray y, visto lo visto, cabe augurar que tardará en sanar varias semanas más.

Acuerdo rápido. El Athletic y Kenan Kodro, que llegó al equipo en enero de 2019 procedente del Kobenhavn danés, alcanzaron ayer un acuerdo para rescindir su contrato, que finalizaba el 30 de junio de 2022. Poco después de conocerse su desvinculación del delantero donostiarra, el Ferhérvár de Hungría anunció su fichaje y colgó una foto con los colores de su nuevo equipo en su web. "Mis primeras impresiones aquí son muy buenas. Espero tener un período exitoso. Nunca he estado en Hungría. Me considero un futbolista ambicioso. Estoy seguro de que seré de ayuda para el equipo", dijo Kodro en la web. El jugador donostiarra deja el Athletic tras disputar 27 partidos oficiales y marcar cuatro goles, tres en competición liguera, el primero de ellos ante el Atlético de Madrid, y uno en Copa. A finales del pasado enero, Kodro salió cedido al Valladolid, donde jugó 14 partidos. Kodro sigue el camino de Ibai Gómez, que también llegó a una solución amistosa con el club para su marcha.