El parón competitivo a causa de la pandemia del covid-19 no se le ha indigestado al Athletic. Es más, ha sido todo lo contrario. Lo ha manejado como una bocanada de aire fresco, sobre todo si se tienen en cuenta las prestaciones que ha ofrecido el conjunto rojiblanco a lo largo de sus seis partidos consumidos en esta rentrée Los números hablan por sí solos y acentúan las opciones de los leones a llegar a tiempo para alcanzar una plaza que le permita el retorno a la Europa League tres campañas después. Pero al margen de lo que dice la clasificación, emerge la letra pequeña, las sensaciones que proyecta el colectivo de Gaizka Garitano, que debe estar como un niño con zapatos nuevos cuando ha conseguido que su equipo recupere la piedra filosofal de su ideario. La solvencia defensiva ha aflorado de nuevo y representa gran parte de la culpa del regreso positivo de los bilbainos, que solo han recibido cinco goles en estas seis jornadas sin público.

El Athletic de Garitano se ha reconocido, aunque es consciente de que todavía no ha logrado nada y que la conquista del pasaporte europeo sigue siendo una misión complicada. Con todo, el equipo rojiblanco es fiable y el miércoles dio un nuevo paso hacia adelante con su exhibición en Mestalla, ya que empequeñeció a un Valencia al que ya supera en la tabla. El Athletic asomó su fortaleza y ratificó que es uno de los conjuntos de LaLiga Santander más difícil de batir cuando su sistema defensivo funciona a las mil maravillas. En el feudo ché logró mantener su portería a cero por segunda vez en esta vuelta a la competición y solo el Villarreal, que está lanzado, Real Madrid y Atlético de Madrid han recibido menos goles que los leones, lo que habla muy bien de la propuesta de un bloque que ha vuelto a encontrarse con las novedades tácticas que ha introducido el técnico, que también ha flexibilizado su fórmula.

Lo cierto es que el Athletic puede presumir de un modelo que le da rédito defensivo. La línea de cuatro apenas la toca Garitano, ya que Ander Capa, Yeray, Iñigo Martínez y Yuri Berchiche son sus hombres de máxima confianza, en tanto que Unai Núñez ejerce como la primera alternativa. El portugalujo compareció de titular ante el Betis y el Barcelona, con sendas actuaciones convincentes, y jugó en el tramo final del duelo ante el Atlético de Madrid, cuando el derioztarra recuperó de forma puntual el sistema de cinco defensas. Quizá repita este mismo plan el domingo con la visita del Real Madrid, líder de la liga, a San Mamés, como ya ocurriera en el duelo de la primera vuelta en el Santiago Bernabéu y donde le sirvió para sumar un meritorio punto. Sin embargo, el antecedente cercano del Camp Nou podría apuntar a que Garitano no se moverá, ya que la defensa de cuatro cumplió pese a la derrota y a las numerosas rotaciones que ejecutó, ya que jugaron Óscar de Marcos en lugar de Capa, Unai Núñez, en el de Iñigo Martínez; y Mikel Balenziaga, por el entonces sancionado Berchiche.

El Athletic dio un golpe de autoridad en Mestalla y confía en dar uno más el domingo frente al Real Madrid, que busca un título de liga que no consigue desde la temporada 2016-17 y después de tener que conformarse con la tercera plaza en las dos ediciones anteriores. La plantilla rojiblanca, que ayer gozó de descanso, vuelve esta mañana al trabajo para preparar el encuentro ante el equipo de Zinedine Zidane y con la incertidumbre de si Garitano tirará de alguna rotación una vez que el próximo miércoles también juega en San Mamés frente al Sevilla, cuarto clasificado. Además, Iñigo Martínez e Iñigo Córdoba están a una tarjeta de la sanción.