El Athletic, destinado a volver a la acción mañana en Ipurua, donde aguardará un Eibar derrotado a domicilio a manos del Real Madrid (3-1), retomó el pulso a la liga el domingo en un vacío San Mamés que impactó a propios y extraños. El nuevo fútbol, sin público en las gradas por culpa de una pandemia que obliga a abrazarse a la precaución, se hizo palpable en La Catedral con un envite de altos vuelos que tocó a su fin con tablas en el marcador y con un desarrollo que dieron por bueno Gaizka Garitano y Diego Pablo Simeone. El técnico argentino, al frente de un Atlético que se agarró al gol de Diego Costa para igualar el tanto de Iker Muniainy sumar un punto en su visita a Bilbao, buscó la remontada en la recta final de un encuentro que siguieron con suma atención y extrañeza iconos rojiblancos como Javier Irureta (Irun, 1-IV-1948), Iñigo Liceranzu (Bilbao, 13-III-1959) y Manu Sarabia (Gallarta, 9-I-1957).

Los tres, además de compartir la opinión de haber visto un "buen" Athletic en el regreso de la competición, admiten lo "raro" que fue ver desnudos los asientos de San Mamés a través de la televisión, así como la carencia del incondicional apoyo de la afición rojiblanca a los leones, si bien "la tecnología para dotar de cierto ambiente virtual al partido no está mal y ayuda a recordar un poco la realidad", apunta Irureta, quien remarca, no obstante, que "es otro fútbol y se me hizo muy extraño ver así el campo". "Un partido sin aficionados es como un cementerio con gente moviéndose de un lado para otro", agrega el exjugador y exentrenador del cuadro bilbaino, quien nunca jugó, ni dirigió un partido a puerta cerrada, circunstancia anómala que el irundarra vincula directamente con los graves errores que cometieron varios porteros durante el fin de semana por la "falta de concentración". No fue el caso de Unai Simón, con los cinco sentidos puestos bajo los palos y salvador en los minutos finales con una extraordinaria intervención que negó el gol al colchonero Santiago Arias y la victoria, por ende, al Atlético, que se midió a un Athletic que convenció a Irureta.

"Vi bien al equipo, salvo en el error defensivo que hubo en el gol de Diego Costa, que vino demasiado pronto tras el 1-0, pero las circunstancias se dieron así y el Athletic aguantó el tipo hasta el final con un buen despliegue físico", expone el extécnico de Irun, que pone en valor la profundidad y la "fuerza de siempre" que exhibieron en uno y otro carril Ander Capa y Yuri Berchiche, reflejo del poderío físico que presenta un bloque de futbolistas al que "la acumulación de tanto partido creo que va a venir bien por sus características". "Muniain también estuvo bien, Unai López se mostró solvente en el centro del campo y Garitano, desde el banquillo, también llevó bien el plan de partido", defiende Irureta, que considera que el preparador derioztarra, en su primer encuentro con cinco cambios a su disposición, movió bien sus fichas para contrarrestar a un rival que no tuvo que hacer frente al tradicional empuje de La Catedral, cuya falta está seguro de que "van a notar mucho los jugadores del Athletic".

"Es un equipo que pone mucho corazón y garra en casa y la ausencia de la gente la van a echar en falta, pero creo que le va a ir bien en este tramo final de liga, porque los futbolistas han vuelto con un buen tono físico y eso es muy importante para lo que viene", constata el propio Irureta, cuyas impresiones comparte Iñigo Liceranzu, a quien también resultó "extraño" ver vacío San Mamés por mucho que llevara "un mes viendo partidos de la Bundesliga". "Es así para todos y lo que no puede permitir la federación es lo que pretenden algunos de que haya público en unos estadios y no en otros", destaca el excentral rojiblanco, a quien gustó, sobre todo, la actuación de los leones "en el primer tiempo, porque en el segundo se cayeron un poco y se notó que el Atlético dispone de un mayor fondo de armario".

"Nunca sabremos qué hubiera pasado en los minutos finales con el campo lleno de gente", indica el bilbaino, que ve "posible, pero complicado" el asalto a la séptima posición y reconoce, a título individual, que "a mí no me hubiese afectado jugar sin público, porque son como partidos de entrenamiento con puntos en juego y yo siempre competía igual que entrenaba".

Manu Sarabia, por su parte, tiene claro que el perjuicio de jugar sin público, pese al empate y la buena imagen mostrada ante el Atlético, será "mayor" para el Athletic en comparación con otros equipos, dado que "la unión entre la afición y los jugadores nos ha llevado a los logros más importantes del club a lo largo de la historia y cuando se habla de jugar con uno más, en San Mamés eso se da casi siempre".

No se dio el caso el domingo, cuando las puertas de La Catedral quedaron cerradas al público, obligando a seguir el choque por la televisión y con la opción de activar un sonido ambiente virtual con el que "se notaba un poco menos la realidad, aunque los jugadores la palparon en primera persona", recuerda Sarabia, quien reivindica que "es una situación especial que hay que asumir y es pronto para sacar conclusiones al haber sido solo el primer partido y en unas situaciones tan particulares, pero el Athletic compitió bien contra un adversario difícil como el Atlético, el resultado fue justo y la administración de esfuerzos hasta el final de liga va a ser un factor muy importante".

"Nunca sabremos qué hubiera pasado en los minutos finales con el campo lleno de gente"

Exjugador del Athletic

"Es pronto para sacar conclusiones, pero el Athletic compitió bien ante un rival difícil"

Exjugador del Athletic

"Gallia est omnis divisa in partes tres, quarum unam incolunt Belgae, aliam Aquitani, tertiam"

Cargo

"Creo que al Athletic le va a ir bien, porque los jugadores han vuelto con un buen tono físico"

Exjugador y exentrenador del Athletic