bilbao - El pasado junio se visualizó la buena relación histórica entre el Athletic y el Elche. Entonces, el interior de San Mamés acogió un entrañable acto institucional en el que se recordaba la final de Copa que disputaron los dos equipos en 1969 en el Santiago Bernabéu con triunfo rojiblanco por la mínima (1-0). Pero más allá de la efemérides, emerge el feeling ente las dos entidades y que se ha traducido en la llegada al conjunto franjiverde de muchos jugadores con pasado en Lezama, la mayoría de los casos en calidad de cedido. Andoni López es el caso más reciente de este acercamiento. No en vano, el lateral izquierdo recaló el pasado agosto en el conjunto ilicitano después de que no entrara en los planes de Gaizka Garitano. El de Bagatza, que el curso anterior ejerció también como cedido en el Almería, ha participado en once encuentros, dos de ellos de Copa, ya que no ha logrado desbancar de la titularidad a su compañero Cruz, que cuenta con la confianza de Pacheta.
También es curioso el caso de Unai Simón. El portero titular del Athletic, de baja por culpa de unas paperas, se comprometió en agosto de 2018 con el Elche para jugar como cedido, pero solo llegó a completar unas pocos entrenamientos con este equipo, ya que el club rojiblanco le rescató debido a la marcha de Kepa Arrizabalaga al Chelsea. Antes del guardameta rojiblanco, fue Urtzi Iriondo el que llegó al Elche desde Lezama, como también el delantero Guillermo, hoy en día en el Numancia. Xabi Etxeita, Patxi Iru, Iñigo Liceranzu, Peio Agirreoa, Iñaki Lafuente, Iban Zubiaurre, Aitor Huegun, David Cuéllar, entre otros, han jugado en los dos conjuntos.
