Bilbao - Los quebraderos de cabeza de Gaizka Garitano a la hora de perfilar un once tipo no solo atañen al centro del campo, donde Mikel Vesga, inédito hasta el domingo, se convirtió en Balaídos en el tercer acompañante de Dani García desde el inicio del curso tras suceder en la titularidad a Unai López y Beñat Etxebarria. Las dudas del técnico rojiblanco se centran también en la banda derecha del ataque, parcela que se mantiene sin dueño fijo y por la que han desfilado ya hasta cuatro jugadores bajo el cartel de titulares. El primero y último en hacerlo, con lesión de por medio, ha sido Óscar de Marcos. El de Biasteri, que arrancó la temporada como complemento ideal de Ander Capa a los ojos de Garitano, partió de inicio en el estreno liguero ante el Barcelona y en la posterior visita al Getafe, donde cayó lastimado en su tobillo izquierdo. Se abrió entonces un casting en el que ninguno de los candidatos ha logrado cautivar plenamente al entrenador derioztarra, tal como se vio reflejado en Vigo con la vuelta de De Marcos al once tras consumar su recuperación. Entre medias, durante mes y medio, fueron Iker Muniain, Gaizka Larrazabal e Ibai Gómez, el descarte de Garitano en Balaídos, quienes asumieron galones en una banda derecha intermitente y carente de la continuidad necesaria en cuanto a nombres y prestaciones se refiere.

Si bien los resultados acompañaron en las primeras jornadas, hasta el punto de alcanzar el liderato tras la victoria ante el Alavés en San Mamés, han sido contados los partidos en los que Ander Capa, con tres asistencias de gol en su haber, ha encontrado la ayuda ofensiva deseada, algo similar a lo que ha ocurrido en la banda izquierda, donde Iñigo Córdoba ha pasado de la titularidad a la grada. Muniain, alejado de la media punta de partida por la presencia de Raúl García, ha sido el encargado de viajar de uno a otro costado para emplearse en ambas demarcaciones con el trabajo y el sacrificio defensivo por bandera, pero sin el impacto necesario en materia ofensiva. Ejemplo de ello es el único gol que suma el capitán rojiblanco en las ocho primeras jornadas de liga, en las que no ha conseguido repartir ninguna asistencia tras un total de 652 minutos de juego. Sin goles y sin asistencias figura también Ibai, titular en dos choques y suplente con presencia sobre el verde en otros dos para un total de 179 minutos de actividad. Larrazabal, que estrenó titularidad ante el Leganés en Butarque y ha comparecido en otros tres partidos saliendo desde el banquillo, sumando 137 minutos en sus piernas en su primer curso como león, tampoco ha logrado perforar las redes rivales, ni asistir a ningún compañero, al igual que De Marcos, en blanco en materia goleadora y como asistente con tres titularidades y 176 minutos a sus espaldas. En Vigo, no obstante, fue el elegido como solución, de nuevo, por Garitano.

La pasada temporada, sin ir más lejos, el técnico rojiblanco ya apostó por el de Biasteri como acompañante principal de Capa. Tras el último partido en San Mamés, en el que el Valencia fue capaz de derrotar al Athletic acabando así con una magnífica secuencia de resultados de los leones como locales, Garitano explicó ante los medios de comunicación que, sin la presencia de De Marcos, “entendemos que Ibai y Muniain son los dos jugadores de la plantilla que mejor se desenvuelven en las bandas sin espacios, mientras que Córdoba y Larra necesitan más sitio”. Con la vuelta a la actividad de Óscar de Marcos, el preparador derioztarra optó el pasado domingo por regresar en Balaídos al plan inicial y confiar así en el 18 del Athletic, solidario como siempre en el esfuerzo, pero sin excesiva profundidad, ni incidencia en ataque.

DE MENOS A MÁS De Marcos, sin embargo, confía en ir recuperando su mejor tono físico “poco a poco” después de estar mes y medio alejado de la competición. A ello hizo referencia el multiusos rojiblanco tras el choque ante el Celta, en el que se quedó sin minutos Iñigo Lekue, el último en presentar su candidatura para aliarse a Capa en el costado derecho. El deustuarra, otro comodín para Garitano, es del gusto del técnico, si bien su larga inactividad dificulta su incursión a corto plazo en una zona del campo a la que también podría regresar Iñaki Williams, a quien el entrenador derioztarra ya ha ubicado en dicha parcela en determinados momentos, al igual que a Raúl García.

Ambos, pese a partir como delantero centro y mediapunta, respectivamente, han visitado también el costado derecho del ataque bilbaino, sujeto a todo tipo de pruebas en un casting que, por el momento, sigue abierto.