ATHLETIC y Real Sociedad escribirán mañana un nuevo capítulo de la historia de los derbis vascos. La tendencia de los últimos años ha traído más alegrías para los donostiarras que para los bilbainos: de los últimos 14 derbis oficiales, el Athletic solo ha podido ganar dos; por los siete de la Real y los cinco empates. “Ellos encuentran la fórmula. La estadística está ahí, pero no hay favoritos”, cuenta Juanjo Valencia, exportero del Athletic. La inercia puede ser más o menos positiva, pero un Athletic-Real Sociedad es diferente a cualquier otro plato del menú futbolístico. El donostiarra militó durante siete años (1992-1999) en la entidad rojiblanca y afronta ilusionado la semana del derbi: “Siempre son partidos especiales. La atmósfera lo convierte en especial. Los equipos acaban de arrancar: el Athletic ha empezado bien y la Real, también. Tengo muchas ganas de ver el partido”.

Es muy complicado decantar el favoritismo en un encuentro de estas características. Juanan Larrañaga vivió de primera mano muchas batallas futbolísticas, no en vano, el exdefensa realista es el segundo jugador con más partidos en la historia del club con 589, solo por detrás de Bixio Gorriz. El azpeitiarra recuerda con alegría dos derbis que le marcaron de por vida: “El primero fue cuando ganamos la segunda liga en Atocha ante el Athletic y el segundo, mi despedida en Anoeta, que fue también ante el Athletic. Esos siempre van a ser especiales para mí”. La leyenda txuri-urdin levantó dos ligas, una Supercopa y una Copa con el equipo de su corazón. Larrañaga opina que “los derbis son partidos especiales y todos muy igualados”, pero a su vez admite que, en los últimos años, la escuadra guipuzcoana se ha sentido “cómoda contra el Athletic”. San Mamés acogerá mañana uno de los partidos más bonitos y coloridos de LaLiga, a partir de las 22.00 horas. El de Azpeitia espera ver ganar a su Real, pero no subestima las armas de los chicos de Gaizka Garitano. “Vamos a ver a dos equipos diferentes: un Athletic aguerrido, que hace daño a balón parado, y una Real que tendrá más posesión de balón y que técnicamente es mejor equipo”, destaca.

La hermandad entre las dos aficiones es un ingrediente predominante en este tipo de partidos. Sobre el césped, todo el mundo quiere que gane su equipo, pero el colorido de las gradas y la buena relación hacen de este duelo todo un ejemplo para el mundo del fútbol. A pesar de no valer más que otro partido, en lo que a puntos se refiere, los derbis siempre son únicos, como recuerda Peio Uralde, exjugador que militó en ambos clubes. “Son muy especiales. Todo el mundo de Bilbao conoce a alguien de Donostia y al revés. Hay esos típicos piques y se vive con más intensidad”, relata.

Alberto López por su parte, estuvo trece campañas (1993-2006) en las filas de la Real Sociedad. A pesar de su larga trayectoria, el exguardameta txuri-urdin no perdió nunca en San Mamés, algo realmente complicado de conseguir y que le enorgullece recordar. “Era una cosa muy agradable visitar San Mamés con lo que supone el derbi, el partido del fútbol vasco más importante. Fue una gozada vivir eso”, reconoce. López destaca que este choque “se vive desde antes del partido”, ya que las aficiones se juntan y “hay muy buen ambiente”. “Espero que no se pierda nunca, hay cosas que deben de estar ahí y eso es lo bonito de los derbis”, añade. En tiempos donde en diversas ocasiones se vive el fútbol como una guerra y no como un deporte, los duelos entre bilbainos y donostiarras destacan por la cortesía por parte de ambos lados: “Siempre tengo mucho respeto a la gente del Athletic, porque en San Mamés siempre me han tratado bien. Ves que otros equipos hablan de este tipo de encuentros y parece que es una batalla”.

Cuando un jugador vive un derbi desde dentro, sabe que se trata de algo distinto. Pablo Orbaiz, exleón, define estos enfrentamientos como “festivos para todos”. “Son partidos que da igual un poco de dónde vengas y la racha de la que vengas, ya que los dos equipos siempre dan un plus”, aclara. Pero si en algo coinciden los protagonistas, es que cada derbi es diferente. A pesar de la dinámica positiva de la Real ante los vizcainos (solo dos derrotas en los últimos 14 duelos), Orbaiz resta importancia al dato: “Supongo que esto es una cuestión de rachas, pero creo que ningún partido es igual al anterior ni parecido al siguiente. Estos días, de mucha intensidad, todo el mundo parte de cero. Puede pasar cualquier cosa independientemente de las rachas o el estado de forma del equipo”.

Javier Clemente, exentrenador de Athletic y Real Sociedad, recuerda con emotividad el significado del derbi: “Para mí es el partido más bonito del año”. La emoción, la motivación y la ilusión por disfrutar de estos encuentros no tiene comparación para el barakaldarra. Clemente cree que los dos equipos “llegan en buen momento”, por lo que se espera un apasionante duelo. En cuanto a la inercia positiva de los guipuzcoanos ante la escuadra vizcaina, el exjugador y entrenador de la selección de Euskadi lo tiene claro: “Cuando un equipo gana es porque ha jugado mejor. La Real ha jugado mejor y ha ganado cuando ha tenido que ganar. El Athletic también le ha ganado en los últimos años algún partido”. Los aficionados vascos vivirán mañana una nueva entrega del apasionante Athletic-Real Sociedad. Nada de lo ocurrido hasta la fecha tendrá influencia en el resultado. Solo habrá tres puntos en juego, como en todos los partidos, pero ganar un derbi siempre es una sensación distinta y se disfruta casi tanto como un título.