Bilbao - El Athletic enganchó a los vizcainos desde el primer día. El fútbol fue un fenómeno que atrajo a masas a las campas de Lamiako, el sitio elegido para los primeros partidos. Allí jugaban también otros equipos que surgían en Bizkaia, como el Bilbao. Este equipo, nacido en 1900 en Algorta, no tardó en convertirse en el máximo adversario del Athletic. A falta de competiciones oficiales, sus duelos amistosos levantaban pasiones.

El 9 de marzo de 1902 el Athletic disputó su primer partido internacional. Mucho antes de que nacieran las competiciones continentales, dos años antes incluso de que naciese la FIFA, el Athletic viajó a Burdeos para jugar contra el Burdigala. Los bilbainos se impusieron por 0-4. Los franceses devolvieron la visita antes de que terminara ese mismo mes. En Lamiako, con tres mil espectadores como cómplices, el Athletic le endosó un contundente 7-0.

En 1902 el Athletic vivió la primera de sus fusiones. El club quería hacerse con los servicios de un jugador talentoso del Portugalete Athletic Club, Perico Larrañaga, y se optó por absorber todo el club de la margen izquierda.

En mayo de ese mismo año llegó el primer trofeo del Athletic. En Madrid, se disputó la Copa de Coronación de Alfonso XIII, un torneo para conmemorar la llegada al trono del monarca. El hipódromo de la capital acogió los partidos. El Athletic decidió fusionarse con el Bilbao para presentar un equipo más potente y jugaron bajo el nombre de Bizcaya. La fórmula tuvo éxito, puesto que los vizcainos se impusieron 5-1 en cuartos de final al Español de Barcelona e hicieron lo propio en semifinales al arrasar con un 8-1 al New Foot-Ball Club de Madrid.

En la final esperaba el FC Barcelona. Los catalanes, liderados por Hans Gamper, no pudieron hacer nada ante el Bizcaya. El 2-1 final trajo a Bilbao un título que el club siempre ha considerado como la primera de sus 24 Copas, aunque la Federación Española no lo considera un título oficial. Luis Arana, Enrique Careaga, Larrañaga, Luis Silva, Amado Arana, Enrique Goiri, Cazeaux, Juan Astorquia, Dyer, Ramón Silva y Walter Evans formaron la alineación del primer Athletic txapeldun.

Poco después, el 19 de mayo, Lamiako acogió de nuevo un pulso entre Athletic y Bilbao. Era su tercer envite y pasó a la historia por ser el primer partido en el que el público tuvo que pasar por taquilla: 30 céntimos fue el precio de la entrada. Los dos equipos se fusionaron de manera definitiva en 1903.

Ese año el Athletic vivió su primer partido épico. En la Copa, de nuevo en Madrid, el Athletic despachó al Español por 4-0 y en la final se vio las caras con el Madrid FC. Los anfitriones llegaron al descanso con clara ventaja. Los bilbainos quedaron apesadumbrados por el 2-0 del marcador, pero Juan Astorquia protagonizó la primera gran arenga del club. Se dice que espoleó a sus compañeros con un grito que sembró la remontada: “¡Por el Athletic y por Bilbao!”. La final terminó siendo para el Athletic.

No fue esa la única huella que dejó el Athletic ese año en Madrid, ya que en 1903 un grupo de estudiantes vizcainos afincados en la capital española crearon el Athletic Club de Madrid, el germen de lo que hoy es el Atlético de Madrid. Durante años funcionó como una sucursal del Athletic.

En 1906 el Athletic, como todos los clubes del Estado, sufrió una grave crisis, en parte surgida por el caos organizativo que había en torno a las competiciones oficiales. El Athletic, para competir en la Copa de ese año, volvió a crear el Bizcaya, esta vez uniéndose temporalmente con The Union FC, un club vizcaino cuyo potencial en ese momento era incluso mayor que el del propio Athletic.