Síguenos en redes sociales:

Fichajes asequibles para un salto de calidad

El Athletic quiere incrementar el potencial de la plantilla incorporando a varios jugadores que compitan por la titularidad La nómina de refuerzos incluiría como mínimo a Sola, Beñat y Etxeita

Fichajes asequibles para un salto de calidadOskar Martínez

bilbao. El Athletic se ha propuesto acometer un salto cualitativo de cara a la próxima temporada consistente en poner a disposición del futuro entrenador un abanico de opciones más amplio de jugadores para afrontar la competición con garantías de éxito. Ante la imposibilidad manifiesta de fichar a futbolistas de un nivel superior a la media que ofrece el actual plantel, ya sea porque económicamente son inaccesibles o porque tampoco hay gente tan descollante en su reducido mercado, el club aspira a potenciar la competitividad del equipo incrementando la nómina con elementos capaces de discutir la titularidad a quienes vienen gozando de una presencia constante en las alineaciones. No sería este el único criterio de los responsables técnicos del Athletic a la hora de encarar las distintas operaciones de refuerzo abiertas, pues también se trataría de subsanar las debilidades detectadas en puestos concretos. No obstante, el objetivo último sería lograr que el Athletic reúna un bloque con más alternativas para conformar tanto el once de salida como las convocatorias, superando así la dinámica de los últimos años.

La plantilla del Athletic presenta una serie de deficiencias, a tenor de cómo ha respondido en la temporada recién finalizada y también por causa de las bajas ya conocidas, especialmente las de Llorente y Amorebieta, jugadores que en condiciones normales serían titulares. Los fichajes susceptibles de abordar están en boca de todo el mundo, una vez descartados aquellos que por su precio son prohibitivos, apartado donde cabría situar a cualquiera con ficha en vigor en la Real Sociedad. La relación que ocupa la rumorología incluye al menos a Beñat, Mikel Rico, Etxeita, Sola, Iago Herrerín y Balenziaga, aunque haya podido sonar algún otro, como Raúl García. La idea que manejaría el club consistiría en favorecer un mayor número de combinaciones en todas las líneas a fin de que ello redunde positivamente en el rendimiento del equipo.

Es posible que, como señaló Marcelo Bielsa, ninguno de los citados posea unas prestaciones que superen claramente las de los jugadores que él ha utilizado con asiduidad. Podría discutirse su criterio en alguno de los casos, pero resulta innegable que en principio todos son válidos para favorecer el concepto de reparto de responsabilidades, algo que debería ir en beneficio del nivel global y, por añadidura, evitaría la infrautilización de un número importante de efectivos, una realidad observada en estos dos años.

Esta operación de reforzamiento de lo ya existente se estaría trabajando con la suficiente antelación. De ahí las noticias que hacen referencia a Kike Sola y los rumores que implican a Xabi Etxeita o Beñat Etxebarria. El Athletic ha efectuado un seguimiento de estos futbolistas y de otros. También ha tenido la oportunidad de analizar sus prestaciones Bielsa, quien lo admitió explícitamente cuando no tuvo reparos en hacer de menos las presumibles incorporaciones, pese a que poco antes declarara que no tenía noticias de las intenciones que al respecto albergaba el club. Es evidente que hay jugadores con tanta o más proyección que los enumerados, entre los que al parecer se hallarían los favoritos del técnico argentino, pero están fuera de mercado. Además, sería un sinsentido aportar 30 millones para reflotar la precaria economía de un rival directo, en concreto el que tiene su sede al otro lado de la autopista.

La política de fichajes es, en principio, una tarea de la competencia del Athletic, independientemente de quién sea el entrenador de turno, pues la labor de las personas que trabajan en Lezama debe velar por los intereses más allá del corto plazo, un tiempo que no necesariamente coincide con los del inquilino del banquillo de San Mamés, como ha ocurrido ahora, por ejemplo. Por otra parte, en Lezama manejan todos los datos referidos a la cantera, para hacer una previsión de lo que hay en sus diferentes escalones. Una información indispensable para diseñar un plan coherente que armonice todos los frentes: la escuela, el mercado y el primer equipo.

En este sentido, la campaña del Bilbao Athletic indica que algunos de sus integrantes cuentan con serias opciones de dar el salto y afianzarse arriba, un proceso en el que hoy estarían inmersos, si bien en una fase más avanzada, Ramalho, Laporte o Galarreta, que de momento apenas han asomado en Primera División y lógicamente precisan de más partidos, para asentarse y demostrar su valía.

CRITERIOS A OBSERVAR Descontando a Llorente, Amorebieta, Castillo y seguramente Igor, el Athletic dispone de veinte futbolistas. Y hay demarcaciones donde se detecta cierta debilidad por el número de efectivos específicos: solo habría un lateral izquierdo, Aurtenetxe, y un delantero centro, Aduriz. Cierto es que en situaciones esporádicas el grupo tiene alternativas, varias que se han utilizado como De Marcos, Iñigo Pérez o Laporte y Susaeta o Toquero, pero son hombres que se amoldan mejor a otras posiciones. A la hora de pensar en incorporaciones, ya habría por tanto un argumento concreto para mover ficha.

Otro aspecto a valorar es la existencia de algunos veteranos, una minoría en una plantilla que se caracteriza por una media muy baja: solo Iraizoz, Iraola, Gurpegi y Aduriz han superado la treintena. Los cuatro vienen siendo fijos en las alineaciones, seguirían estando capacitados para competir, pero su recorrido es objetivamente más limitado. Precisamente, la juventud del plantel aparece como una garantía de futuro, son muchos los que poseen ya un bagaje importante en la elite y tienen aún muchos años por delante para confirmar las expectativas depositadas.

El objetivo propuesto sería apuntalar el plantel con la llegada de futbolistas que en todos los casos mejorarían a nivel personal su situación deportiva y económica. Encima, se da la particularidad de que todos ellos han pertenecido en el pasado al club, militando en diferentes categorías, de modo que poseen un vínculo, una identificación, con la camiseta rojiblanca. Un hecho que en los tiempos que corren merece ser estimado y que, de paso, podría tener su influencia en el resultado de las operaciones que Ibaigane ha puesto en marcha.