bilbao. El presidente del Barcelona, Sandro Rossell, advirtió tras la finalización del encuentro que su equipo disputó y ganó frente al Levante que "el próximo encuentro de Copa frente al Athletic va a ser complicado, pero vamos a Bilbao a jugarlo".

Lo que sí prometió el máximo dirigente azulgrana desde el antepalco del coliseo barcelonista, en declaraciones a Canal + Liga, es que "Pep Guardiola y los nuestros se tomarán el partido en San Mamés muy en serio", dejando claro que el Barça quiere conseguir este curso todos los títulos en juego.Pese a todo, Rossell recordó que "el fútbol es un juego. Si se gana, bien; si no, otra vez será". El presidente azulgrana reconoció que Afellay "estará a disposición del míster desde mañana (por hoy), pero si entra en la convocatoria para Bilbao es una decisión de los técnicos".

Por su parte, Pep Guardiola explicó que su equipo quería ganar al Levante, sobre todo, "para dedicarle la victoria a Xavi", que con 549 partido igualó a Migueli como el jugador que más encuentros oficiales ha disputado con la camiseta azulgrana. "Queríamos ganar por él. Está operado de cruzados, tiene 30 años y ha jugado 549 partidos. Yo estuve muchos años aquí, jugué 300 y ya me parecieron muchísimos. Lo suyo es una bestialidad. Si sus tendones aguantan, creo que puede llegar a los 700", declaró Guardiola.

El técnico catalán reconoció estar "feliz", no solo por los tres puntos, sino por el juego que desplegó su equipo. "Me preocupaba mucho este partido y me voy satisfecho por cómo lo hemos afrontado", señaló el entrenador azulgrana, quien explicó que "pasarán cincuenta años y seguirá costando cuando un equipo ponga el autobús atrás".

Guardiola elogió el partido de Busquets como central -"sabía que podía hacerlo bien, porque es muy atento, disciplinado y tiene muy buena salida de balón"- y también el de Thiago como revulsivo en la segunda mitad.