Elrow se ha convertido en un referente mundial de la música electrónica gracias a su capacidad para transformar cada fiesta en un espectáculo inmersivo y desbordante de creatividad. Al frente del área de Recursos Humanos está Belén González, con quien hablamos sobre los retos de gestionar el talento en una empresa que vive entre la música, el arte y la imaginación.

¿Cuál es el mayor reto al que se enfrenta a la hora de captar talento?

En Bizkaia, una parte del talento llega de manera orgánica. Hay mucha gente que quiere formar parte de Elrow, por lo que representamos como marca y como cultura. También trabajamos con headhunters (cazatalentos) locales, universidades, escuelas de negocio y redes profesionales. Además, el boca a boca en la comunidad y en la torre donde tenemos las oficinas, es clave para atraer talento. El reto está en que necesitamos perfiles muy diversos —creativos, de marketing, de producción, gestión de proyectos, finanzas— y competimos con multinacionales que ofrecen estabilidad. Nosotros ofrecemos un entorno más dinámico y cambiante, y buscamos gente flexible, curiosa y con ganas de aportar.

¿Cuesta competir con esas empresas?

No es sencillo. Para competir con empresas más tradicionales, que ofrecen carreras muy marcadas y previsibles, nosotros apostamos por un proyecto único que te permite viajar, crecer profesionalmente y moverte en distintas áreas. El reto desde recursos humanos es comunicar bien ese valor diferencial: un entorno que potencia la creatividad, genera experiencias únicas y favorece el desarrollo personal.

¿Han cambiado las expectativas de los candidatos?

Sí, totalmente. A la hora de contratar, no nos basamos solo en lo que dice un currículum o en los años de experiencia. Buscamos candidatos con actitud, pasión por el sector, capacidad de trabajar en equipo y adaptarse a un entorno creativo y en constante cambio. Ofrecemos transparencia en el proceso porque muchos llegan desde entornos más tradicionales a algo que nunca se habían planteado.

¿Qué perfiles les está costando más encontrar?

En Bilbao apostamos por perfiles generalistas, sobre todo corporativos —financieros, legales—, y esos resultan más fáciles de encontrar porque vienen de la banca, los despachos o la industria. Lo que cuesta más encontrar son los perfiles nicho vinculados a la creatividad de los eventos, project management o perfiles más artísticos. Es una industria muy específica .

¿Existe fuga de talento en su sector?

Somos muy respetuosos con la competencia y no solemos captar perfiles de otras empresas. Elrow tiene mucha alma, calidez y empatía, y eso nos permite mantener baja la rotación pese al estrés y la exigencia del sector.

¿Cuál es el origen de los empelados de Elrow?

Tenemos perfiles nacionales, pero también internacionales. Nos gusta contar con gente de fuera porque aportan otras culturas y formas de hacer, enriqueciendo el negocio. Lo importante es que sepan adaptarse a un entorno exigente y cambiante.

¿Cómo ve el futuro de la empresa?

Tenemos mucha presencia en Iberia, pero también en Oriente Medio, Estados Unidos y Latinoamérica. Antes hablábamos de temporada de verano, pero ya no existe: cuando no estamos en Europa, estamos en la otra punta del mundo. Hay expansión internacional y mucho camino por recorrer.