Borcier S.A., una empresa de la marquesa María de Borbón y de Rojas, prima de Juan Carlos I, ha solicitado que se les prohíba la entrada a sus terrenos a los vecinos afectados por la DANA de El Reatillo, una aldea de Requena, Valencia. Según informa 'elDiario.es', la compañía ha enviado una carta en la que afirma no entender “este empecinamiento en pasar por nuestra propiedad habiendo dos caminos públicos y no siendo nosotros responsables de ninguna reparación de la vía destruida por la DANA”.

Borcier S.A. es la propietaria de gran parte de las tierras de la zona. La empresa de la marquesa posee en la finca conocida como Coto del Reatillo 1.997 hectáreas de tierra, el equivalente a casi 2.800 campos de fútbol, de huerta de secano, pinar y monte blanco.

En la aldea residen, al menos, tres vecinos de avanzada edad y un pastor. La finca de la prima de Juan Carlos I está muy cerca, en el kilómetro 10.600 de la CV-395, y es también un coto privado de caza.

La “devastadora” DANA derribó el puente que conecta la aldea a la carretera, cuenta la misiva, en la que Borcier S.A. aprovecha para recordar que no es responsable de su reparación y que “no concede ni ha concedido ningún permiso” a los residentes para atravesar la finca, por lo que no se hará responsable de ningún “incidente”.

Según la mercantil, los vecinos de la aldea se han desplazado “con vehículos o a pie y con perros sueltos dentro de un coto privado de caza”, además de atravesar parcelas de cultivo.

Ramón José de la Cierva García-Bermúdez, marido de María de Borbón y marqués de Mairena, es el administrador único de Borcier S.A. y quien firma la carta. La envió el pasado 7 de noviembre a la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), a la Conselleria de Agricultura, Aguas. Ganadería y Pesca y a los ayuntamientos de Requena, Siete Aguas y Chera.

María de Borbón y de Rojas, marquesa de Esquilache, figura como apoderada de la empresa administrada por su esposo. También ocupan la misma posición los hijos de ambos, Iván y María de la Cierva Borbón.

"Empecinamiento" vecinal

La empresa reconoce que los aldeanos “se encuentran incomunicados” a consecuencia de la DANA, pero apunta a que fue “por decisión propia al no haber aceptado la evacuación de la Guardia Civil”. El administrador de la compañía denuncia que los vecinos “se niegan a trasladarse” por los caminos públicos que unen El Reatillo con las Oliveras, a pesar de las indicaciones del instituto armado.

Los dueños de la finca aseguran en el mismo documento que los aldeanos dañaron su propiedad y se pusieron en peligro, ya que “el terreno está peligroso, embarrado, inestable e inclinado”. Denuncian la “creación ilegal de una ruta” en su terreno e insisten en dejar constancia de su “oposición” a que los vecinos transiten por su propiedad.

La carta reincide en que "estos vecinos de la aldea del Reatillo, de forma voluntaria, no han querido ser evacuados y reubicados por el helicóptero de la Guardia Civil que aterrizó en la aldea, y que disponen de dos caminos públicos, que están bastante mejor de estado que la ruta peligrosa que están creando sin permiso de nadie y usando libremente sin permiso".

A pesar de la queja, el marqués de Mairena defiende la ayuda que han prestado a los vecinos de la zona afectada por la DANA gracias a las placas solares y la comunicación por satélite con las que cuenta la finca: “Toda la gente de Chera y Requena que ha querido comunicarse con sus parientes ha podido, era como una romería”.