El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, se ha mostrado crítico con la gestión del Gobierno central con la crisis migratoria que padece el archipiélago pues lo que hace es “mirar para otro lado”. “Nos dan largas”, afirmó en una comparecencia a petición propia ante el Pleno del Parlamento de Canarias en la que censuró la “falta de voluntad política” para resolver la situación, como se demostró el pasado fin de semana cuando no había capacidad para acoger a más menores migrantes en El Hierro y hubo “presiones” desde los medios del Estado.

No obstante, urgió al Ejecutivo que se “siente” con PP y Junts para ultimar la reforma de la ley de extranjería, al tiempo que resaltó que “nadie” ha explicado por qué no ha habido encuentros. En su opinión, el pueblo canario y los menores migrantes “se merecen el respeto de al menos intentarlo”.

Por ello pidió un “compromiso claro” a socialistas y populares para cerrar la negociación y avanzó que presentará otra comunicación ante el Parlamento de Canarias con una propuesta de simulación de distribución de los menores migrantes. Dijo también que a Canarias no le “valen” los 35 millones para la acogida aprobados esta semana y ha demandado 150 millones, especialmente porque la UE tiene fondos para estos casos.

El presidente afeó al portavoz socialista, Sebastián Franquis, que también hiciera pública la reunión del 12 de agosto –este la ha enmarcado en el encuentro de portavoces– y dejado claro que hace falta un “acuerdo de país” que incluya a todas las instituciones. Cuestionó a los socialistas porque “desenfocan el tiro” y se toman “a chufla” el “drama” migratorio de las islas, más aún cuando hay un “problema de gestión” que ha dejado “sola” a Canarias.

En ese sentido reivindicó el “mismo trato” que se dio a la acogida de ucranianos y afganos, un proceso que “coordinó” el Gobierno central, hasta el punto de que se “hacían fotos” de la llegada en Torrejón de Ardoz. Sobre el papel del PP canario, socio de gobierno en el archipiélago, apuntó que les reprochó que ni siquiera se abstuvieran en la votación para tramitar la proposición de ley pero no oculta que debe mirar, principalmente, a quien gobierna.

Además negó que haya un cambio de política migratoria en su Ejecutivo pues todos los menores no acompañados se acogen y no se les deja “a la intemperie y sin comida” pero sí subrayó que era necesario revisar los protocolos para “blindar” sus derechos y los de los trabajadores públicos. “No vamos a ser cómplices de que los menores vean sistemáticamente vulnerados sus derechos. No vamos a ser cómplices de que el pueblo canario tenga que soportar en solitario toda la presión migratoria del continente africano”, comentó.

Raúl Acosta, portavoz de AHI, se preguntó “dónde está la Comisión Europea” ante la crisis migratoria de Canarias cuando sí se presentó en Lampedusa y por qué el Gobierno de España no ha pedido la activación del Frontex. “Hablamos mucho, decimos poco y lo peor es que hacemos mucho menos”, resumió de este modo de análisis de la situación. El portavoz de ASG, Casimiro Curbelo, resaltó la “unidad” del pacto canario por la inmigración y exigió “diálogo” para encontrar una solución, que pasa en su opinión por la reforma de la ley de extranjería. “Malo para la política si no llegamos a acuerdos”, apuntó. Nicasio Galván, portavoz de Vox, criticó la “nula planificación” y el “nulo interés” del Gobierno central en materia migratoria e ironizó con que el presidente, Pedro Sánchez, viajó a África para defender las deportaciones.