El 6,3% de los vascos apenas puede llegar a fin de mes y 10,2% está en riesgo de pobreza

Según la Encuesta de Condiciones de Vida (ECV) publicada este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), en Euskadi los parámetros que miden la calidad de vida han tenido una evolución dispar, ya que algunos mejoran pero otros han experimentado la tendencia contraria.

Así, a lo largo del año pasado se redujo en dos décimas hasta quedar en el 15,5% la tasa Arope, que mide la pobreza no solo según los ingresos, sino que también incluye la privación material severa y la baja intensidad de empleo.

Ese porcentaje del 15,5% es además la menor tasa de todas las comunidades autónomas y está muy por debajo de la media nacional del 26,5%.

En el caso concreto del riesgo de pobreza, en Euskadi afecta a un 10,2% de la población. Una cifra que también mejora con respecto a 2022 cuando era del 12,2% y es de nuevo la menor de todo el Estado, donde el riesgo de pobreza es casi el doble, en concreto, del 20,2%.

Sin embargo varios indicadores de las condiciones de vida han empeorado en Euskadi en el último año. Así, ahora hay un 6,3% de hogares que tienen muchas dificultades para llegar a fin de mes, frente al 3,9% del año anterior.

También ha aumentado el número de familias que no puede hacer frente a gastos imprevistos, ya que ha pasado del 18,7% al 20,6%, y las que incurren en retrasos en pagos relacionados con la vivienda principal o en compras a plazos que ahora son el 10,4% (en 2022 eran el 7,2%).

Además, casi una de cada cinco familias vascas (19,4%) no puede permitirse irse de vacaciones fuera de casa al menos una semana al año. En 2022 el porcentaje de hogares en esta situación era algo inferior, del 18,7%.

En todo caso las condiciones de vida son Euskadi mejores que en el conjunto del Estado, donde el 33,1% no puede irse de vacaciones, el 37,1% no puede afrontar gastos imprevistos, el 13,6% incurre en retrasos de pagos y el 9,3% sufre mucho para llegar a fin de mes.