Bares, restaurantes y negocios donde el trabajo implique ejercicio físico podrán mantener el aire acondicionado “en el entorno de los 25 grados”, teniendo en cuenta las recomendaciones de la legislación laboral, frente a los 27 grados que contempla el real decreto de medidas de ahorro y eficiencia energética aprobado por el Gobierno español. Tras las críticas recibidas desde algunos sectores, la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, aclaró ayer que hay espacios laborales que no tienen obligación de poner el termostato en verano a 27 grados porque “necesitan una temperatura distinta”.

“La norma tiene excepciones” y se aplicará con “flexibilidad”, señaló la ministra, que puso como ejemplo los casos de las cocinas de los restaurantes, donde aseguró que “se va a preservar una climatización acorde para que los trabajadores tengan unas condiciones climáticas adecuadas”.

Ribera añadió que también estarán exentos de limitar el termostato los supermercados en las zonas en las que hay que “mantener la cadena de frío” de los alimentos, así como las discotecas y gimnasios, que necesitan una temperatura distinta a otros espacios como una librería. “No se puede pedir a trabajadores que están en condiciones de ejercicio físico importante que no tengan las condiciones que el derecho laboral garantiza con respecto a los máximos y mínimos de temperatura”, apuntó Ribera en declaraciones a Onda Cero.

Eso sí, los comercios y establecimientos deberán justificar cuándo no aplican el límite de temperatura en el termostato. “Habrá que justificar qué locales pueden tener una temperatura diferente, porque hay espacios como discotecas, cocinas o gimnasios que necesitan una temperatura distinta, pero no es el caso, por ejemplo, de una librería”, señaló. También aclaró que “la recomendación del derecho laboral es que la temperatura esté en el entorno de los 25 grados, pero hay que entender y valorar caso a caso”. “Lo que no puede ser es que esté a 19, porque una cosa es la temperatura cómoda para los trabajadores y otra cosa es pasar frío”, subrayó.

La norma aprobada el pasado lunes para no calefactar por encima de los 19 grados ni refrigerar por debajo de los 27 grados afecta a los edificios y locales de uso administrativo, establecimientos comerciales como grandes almacenes o centros comerciales, espacios culturales como cines o centros de congresos, o infraestructuras destinadas al transporte de personas como estaciones y aeropuertos. Ribera insistió en que el real decreto “está para cumplirse” y representa un “esfuerzo razonable y con respeto a las condiciones laborales que, en todo caso, se deben tener presentes”, al tiempo que afirmó que el Gobierno estatal no realizará modificaciones al respecto. Insistió en que las medidas son “de aplicación fácil” y buscan que las familias y las empresas tengan que hacer un mínimo esfuerzo.

También la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, defendió que existen “las excepciones necesarias” que además permiten “garantizar que los trabajadores tengan un espacio donde puedan desarrollar su trabajo con el confort necesario, en lugares como las cocinas y las lavanderías”, con una climatización adecuada.

Dentro de los hogares

Por otra parte, Ribera descartó que el plan de contingencia contemple restricciones o prohibiciones dentro de las casas, si bien sí propondrán recomendaciones “muy conocidas y muy clásicas” relativas a los termostatos, las ventanas, los toldos y los electrodomésticos. Así, insistió en que busca “no dañar la necesidad ni el confort” de las familias y el tejido productivo y prometió que compartirán el borrador “tan pronto” lo tengan con todas las administraciones, los grupos parlamentarios y los principales sectores sociales y económicos.

La ministra cerro también la puerta a seguir las últimas recomendaciones del FMI, en las que pide que sean los consumidores quienes soporten todo el incremento de los costes de energía. Consideró que, ante la capacidad fiscal española, la actuación del Gobierno es más adecuada, puesto que seguir las recomendaciones del FMI “requiere una gran dotación de recursos para las familias más necesitadas”, para quienes ha considerado que tendría un impacto redistributivo muy duro. l

Las recomendaciones

INSTH Dependiendo de la actividad física

Según el Institucional Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo (INSHT), la temperatura ideal en el trabajo oscila entre los 17 y los 27 oC cuando se realizan trabajos sedentarios y entre los 14 y los 24 oC cuando el trabajo requiere más actividad física. Y no solo hay que tener en cuenta la temperatura; para alcanzar una mayor grado de confort térmico también intervienen factores como el grado de humedad y la circulación del aire.

RITE No menos de 26 oC en invierno y en verano

El Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios (RITE), que tiene que ver con la normativa en prevención en riesgos laborales, fija la temperatura del aire acondicionado en oficinas en no menos de 26 oC, con una humedad relativa de entre el 30 y el 70%. De hecho, concretaba la temperatura ideal en el ambiente tanto en verano como en invierno.

Temperaturas ideales

  • En verano. La temperatura ideal en verano para garantizar confort en un espacio interior oscila entre los 23 y los 27 ºC, y hay que tener en cuenta que la diferencia de temperatura respecto al exterior no supere los 12 grados, para evitar el shock térmico.
  • En invierno. La temperatura ideal de calefacción en un espacio cerrado está entre los 19 y 21 ºC de temperatura y hacer trabajar por encima de estos valores la calefacción repercutirá en un mayor consumo de energía y en falta de confort térmico, ya que esto incluye factores como el sobrecalentamiento de habitaciones o la sequedad del ambiente.

Aires y calefacción

  • Termostatos. No es recomendable programar el airea acondicionado en verano a una temperatura muy baja, ya que si entre la temperatura ambiente y la temperatura consigna –la programada en el aire acondicionado– hay mucha diferencia, se fuerza al equipo haciendo que consuma más energía y generando una situación incómoda para los usuarios.
  • Calefacción. Al igual que con el aire acondicionado, el uso de termostatos para calefacción también ayuda a conseguir una temperatura óptima de calefacción. Asimismo, es importante garantizar unos niveles adecuados de humedad y de circulación del aire; es importante ventilar para tener una óptimas calidad del aire.