En medio de un calor sofocante, se vivieron ayer en Gasteiz las primeras pruebas de la OPE de Osakidetza 2018-2019 que pretende paliar la temporalidad en la sanidad pública. En la primer fase, este fin de semana, una media de 24 aspirantes optan a cada una de las 1.611 plazas ya que 38.654 candidatos quieren conseguir un trabajo fijo. Estas plazas recogen las 332 destinadas a Medicina de Familia y las 51 de Pediatría, las especialidades donde el déficit de facultativos es mayor. “Todo ello con el objetivo de reforzar y dotar de mayor estabilidad a la Atención Primaria”, según declaró a primera hora, la consejera de Salud, Gotzone Sagardui.En este sentido, la máxima titular de Salud, puso en valor el esfuerzo que realiza el Servicio vasco de Salud en la organización de esta OPE, “una muestra más del compromiso y de la voluntad por la estabilidad y la calidad del empleo público”.

La consejera dedicó sus primeras palabras a quienes ayer concurrieron a los primeros exámenes, “profesionales muy bien preparados, que han hecho un esfuerzo para presentarse”. “Esta es la prueba de que, a pesar de la pandemia, del tensionamiento que hemos vivido en Osakidetza por el covid-19, hemos estado trabajando en otros aspectos que son fundamentales para nosotros, como es dotar de estabilidad a su plantilla”, indicó.

“Somos conscientes de que lo mejor de Osakidetza, el bien más preciado, son sus profesionales y queremos afianzar y mejorar su situación”, recalcó. Sagardui insistió en que en esta OPE se ha querido dar “prioridad” a la Atención Primaria, para acabar con la interinidad, lo que redundará en beneficio de todo el sistema.

Un proceso en dos fases

En esta Oferta Pública de Empleo se lanzan 3.535 plazas y el proceso se ha dividido en dos fases. Los exámenes de la primera se han celebrado este fin de semana en el Aulario de la UPV/EHU de Vitoria, y los días 2 y 3 de julio, las pruebas se realizarán en el BEC.

Los exámenes de la segunda fase se desarrollarán en otoño y se han inscrito más de 78.000 personas para 1.924 plazas ya que contemplan aquellos puestos que tradicionalmente atraen a un mayor número de solicitantes como son las de auxiliar de enfermería, auxiliar administrativo y celador.

Ayer sábado se celebraron además los exámenes para logopedas, matronas, técnicos de anatomía patológica, citología, diplomados de óptica y optometría, enfermeros de Salud Laboral y técnicos en dietética. Hoy domingo les tocará el turno a los pediatras, técnicos de audioprótesis y en radioterapia, posteriormente a enfermeros de salud mental, terapeutas ocupacionales y técnicos de documentación sanitaria.

En el BEC las pruebas empezarán el 2 de julio con los candidatos a administrativos, seguirán las de fisioterapeutas y trabajadores sociales, y por la tarde las de los técnicos de laboratorio, para continuar al día siguiente con los exámenes a enfermeros y técnicos de radiodiagnóstico. l