Una de cada cuatro personas de los países industrializados sufre de soledad. La OMS lo califica como una pandemia silenciosa que afecta a más de dos millones de personas en el Estado, de las que cien mil son vecinos vascos. Con el fin de reflexionar sobre este fenómeno, BBK Kuna Institutoa ha publicado el libro 'Soledades: una cartografía para nuestro tiempo', fruto de uno de sus proyectos cero.

La publicación es una investigación coordinada por Melania Moscoso y Txetxu Ausín que plantea un análisis de la soledad no deseada sobre tres ejes: el auge del individualismo y el declive de las redes de apoyo social y familiar, la crisis de los cuidados en un contexto de desigualdad y precariedad crecientes, y la ambivalente relación del individuo con las tecnologías digitales.

La soledad es, según contó ayer martes en la presentación de la publicación Nora Sarasola, directora de la Obra Social de BBK, "un tema que llevamos trabajando desde hace muchos meses" e invitó a recordar a Mercedes, la escultura hiperrealista creada por Rubén Orozco que protagonizó la campaña de "Invisible Soledad". "Se realizó para dar visibilidad a este problema y para tratar de sensibilizar sobre él", indicó Sarasola, quien remarcó que "el covid-19, ha evidenciado que es, desde luego, uno de los grandes retos tanto del futuro como del presente".

Sarasola subrayó que la soledad aumenta el riesgo de mortalidad y que afecta a los principales indicadores de salud habituales. Señaló que, según un estudio de The Institute for Health Metrics and Evaluation de la Universidad de Washington, de mantenerse la tendencia habitual, el Estado será en 2050 el país más envejecido, por delante de Japón. Por lo tanto "será uno de los principales retos que debemos afrontar".

"Melania y Txetxu han realizado un relato fiel de la magnitud de esta realidad de las carencias, del dolor, la angustia y la tristeza que provoca y analizan con detalle cómo esta está relacionada con hábitos como la pobreza, el género, la cultura", indicó sobre el proyecto.

Melania Moscoso, una de las coordinadoras del proyecto, señaló ayer martes que la publicación es "el primer resultado de una pequeña retrospección de campo que hicimos en Madrid durante la pandemia de covid-19". Según contó, para profundizar en la temática en cuestión, se hicieron diversas entrevistas personales y vieron que "la soledad era un emergente".

Txetxu Ausín, coordinador de la publicación junto a Moscoso, explicó que "queríamos analizar un fenómeno especialmente complejo. Es un fenómenos es muy relevante que ha florado especialmente durante la pandemia, pero que ya estaba ahí aunque no estaba visible".

"cifra alarmante"

Ausín quiso destacar que una de cada cuatro personas sufren de soledad, "una cifra realmente alarmante". "Tiene efectos sobre la salud física, sobre la salud mental, tiene efectos también sobre nuestras relaciones. No es un fenómeno que sea meramente individual, la soledad puede estar desencadenada por una circunstancia personal, ya sea por la pérdida del trabajo, de una pareja...", explicó. "La soledad es personal pero también es social y política; tendríamos que plantear cómo podríamos abordar este fenómeno para poder mejorar una realidad que está ahí", reflexionó.

Tras esta primera fase del proyecto, que ha culminado con la publicación del libro, se desarrollará una segunda fase en las que se recopilarán diversas historias de vida de personas que sufren o han sufrido soledad porque, según indicó Ausín, "una cosa es tener la teoría, pero también hay que conocer de primera mano lo que es".

"Es el primer resultado de una pequeña retrospección de campo durante la pandemia"

Coordinadora del proyecto

"Es un fenómeno que ha aflorado durante la pandemia pero que ya estaba ahí"

Coordinador del proyecto