El proceso de vacunación en Euskadi sigue dando pasos y cubriendo etapas con el ritmo que marcan la disponibilidad de dosis y los calendarios diseñados para los diferentes colectivos sociales y laborales. Así, el lunes comenzarán a ser vacunados contra el covid-19 las personas de más de 90 años y los profesores de los centros educativos privados concertados que trabajen en los niveles de Infantil y Educación Especial. En paralelo, las medidas sanitarias, que según los responsables de Salud, aún no se pueden relajar, facilitan el descenso de casos -368 positivos detectados el jueves-, de la tasa de incidencia acumulada -282,04 por cada 100.000 habitantes- y de ingresos hospitalarios.El viceconsejero de Salud, José Luis Quintas, dijo ayer que se prevé que la vacunación de las personas centenarias concluya este fin de semana, antes de lo previsto, ya que Osakidetza ha comprobado que aproximadamente 800 de los 1.800 mayores de 100 años con tarjeta sanitaria del Servicio Vasco de Salud residen actualmente fuera de Euskadi y no han acudido a las citas señaladas, aunque Osakidetza mantiene las “puertas abiertas” para vacunarles cuando vuelvan. Al haberse encontrado con menos población centenaria a inocular de la que habían previsto, Osakidetza acorta plazos y puede avanzar con el siguiente segmento de edad, el de nonagenarios y nonagenarias, con los que ya ha empezado a contactar para indicarles lugar y fecha para recibir la vacuna de Pfizer a partir de la semana próxima. Quintas señaló que la vacunación de estas personas tendrá lugar “preferentemente” en los centros sanitarios.

Según señaló el viceconsejero de Salud, hasta ahora 46.556 personas han completado su vacunación al haber recibido la segunda dosis. Por colectivos, desde que comenzó la vacunación a ertzainas la semana pasada casi la mitad -el 46,2%- han recibido la primera dosis, que también ha sido suministrada al 23,5% de los profesionales de la sanidad privada. En las residencias el 94,3% de los mayores y de los profesionales que les atienden han recibido las dos dosis, un porcentaje que baja al 28,8% en el caso de los profesionales de Osakidetza. Recordó que de forma paralela se está vacunando a grupos priorizados, como los profesionales de centros de día, centros de discapacidad, personas con gran discapacidad que viven en sus domicilios y los servicios de ayuda a domicilio. Los usuarios de centros reciben la vacuna de Pfizer y los trabajadores, la de AstraZeneca. Quintas afirmó ayer que “el avance definitivo en la vacunación se producirá cuando haya dosis suficientes para poder pinchar 15.000 dosis diarias. Eso no podemos hacerlo ahora porque la disponibilidad de vacunas es la que es”.

Respecto al personal del transporte sanitario urgente y programado concertado con Osakidetza, el viceconsejero informó de que las primeras dosis se comenzaron a poner el jueves a las 15.00 horas y de que este fin de semana se continuará vacunando, de forma que las empresas más pequeñas pueden haber finalizado la vacunación el lunes y las más grandes a lo largo de la próxima semana. Quintas también señaló que Osakidetza entregará certificados de vacunación a todos los ciudadanos que lo requieran y que la inoculación con todos sus detalles quedará registrada en la historia médica personal de cada paciente.

Personal educativo

En cuanto a los trabajadores del sector educativo, ayer por la tarde comenzó la vacunación del personal docente y no docente de la escuela pública de menos de 55 años -ya que reciben la vacuna de AstraZeneca-, empezando por las personas que están en contacto con menores que no utilizan mascarilla. Ahí se incluye el personal de escuelas infantiles privadas, del consorcio Haurreskolak, docentes de Educación Infantil, Educación Especial y monitores y monitoras de comedores escolares. Según las estimaciones del Departamento de Salud, se trata de un colectivo de más de 15.000 personas. A estos se sumarán en breve los profesionales de centros concertados que tratan con niños de hasta 3 años. Por lo que respecta a los trabajadores de la educación mayores de 55 años, el sindicato UGT informó recientemente de que serán vacunados con los viales de la farmacéutica Janssen -de Johnson & Johnson-, pendientes de ser aprobado por la UE.

En una comparecencia para informar sobre la situación epidemiológica de Euskadi, Quintas, acompañado del subdirector de Salud Pública y Adicciones, Koldo Cambra, subrayó la importancia de seguir extremando las medidas preventivas, ya que la evolución de la pandemia indica que “no es momento para la relajación”. Se refirió en concreto a que no es conveniente la “flexibilización de las medidas preventivas” en las residencias de mayores a pesar de que arrojan muy buenos datos. De hecho las diputaciones forales informaron de que en las de Bizkaia y Gipuzkoa no hay ningún caso positivo de coronavirus y en las alavesas nueve usuarios permanecen con la infección activa.

Un factor que preocupa y genera “incertidumbre” es el “rápido” incremento en la circulación de la variante británica del virus, detectada en el 42,2% de los nuevos casos contabilizados la semana pasada. Quintas explicó que Euskadi continúa en la fase de descenso de la curva de incidencia, pero resaltó que esta bajada está ralentizándose y es necesario observar la evolución del índice reproductivo -que mide a cuántas personas contagia cada caso positivo, actualmente en 0,86- y al número de nuevos positivos. “En cualquier caso, el número de contagios sigue siendo elevado en Euskadi. Nos encontramos lejos del objetivo de reducir la incidencia acumulada por debajo de los sesenta casos”, subrayó.

Cuando se cumple un año de la primera notificación oficial de casos de covid-19 en Euskadi, con un balance de 157.000 personas infectadas y 3.797 fallecidas, los responsables del Departamento de Salud advirtieron de que la extensión de la varíante británica “es cada vez mayor y dentro de un plazo relativamente pronto, probablemente se convierta en la versión del virus dominante”. También informaron de que Osakidetza analiza dos casos probables de la variante sudafricana, contactos de casos importados, que están pendientes de confirmación.

Positivos. El jueves se hicieron 7.580 pruebas y se detectaron 368 positivos, frente a los 402 del miércoles. La tasa de positividad ha subido al 4,9%, el peor dato en lo que va de semana.

Incidencia. La incidencia acumulada sigue a la baja con 282,04 casos por 100.000 habitantes en catorce días, después de que el miércoles bajara por primera vez desde el 9 de mayo de los 300 casos.

Hospitales. El jueves ingresaron 45 nuevos enfermos, 12 menos que el miércoles, y en las UCI había 126 personas, 3 menos. En planta hay 313 hospitalizados, 19 menos, por lo que en los hospitales vascos el jueves había 439 enfermos de covid, 22 menos.

Hasta la fecha Euskadi ha recibido 195.560 vacunas -149.760 de Pfizer, 7.900 de Moderna y 37.900 de AstraZeneca- de las que se han administrado 124.103. Hay 44.136 vacunas preservadas para la segunda dosis. Además, 46.556 personas han concluido ya su pauta de vacunación completa al recibir la segunda dosis.