Igor Artola, dueño del "Radikal Cheyenne Saloon" en Anoeta, y del "Chopper Bar" en Donostia, considera que las restricciones impuestas a la hostelería para su reapertura son excesivas. "Es anecdótico que nos dejen el 100 % de la terraza en pleno invierno. Nos van preparando. Avanzan que la apertura será solo de exteriores, y luego nos dan las migajitas para que estemos contentos".

David Núñez, propietario del "Jaque Café" de Portugalete, comparte la misma opinión. "Es una limosna. Nos tienen cerrados un mes, y ahora nos dejan abrir solo hasta las ocho de la noche. Estoy indignado".

Algo más optimista es Raquel Martínez Olano, dueña del "Goikoa" de Gasteiz, aunque dice que afronta la apertura de la hostelería con cautela. "Reabriré sola porque no puedo jugar con el trabajo de las personas. No puedo sacar a mis empleados del ERTE para después volver a meterles si cambia la situación epidemiológica".

HOSTELERÍA DE BIZKAIA

por su parte, y en la misma línea, el gerente de la Asociación de Hostelería de Bizkaia, Héctor Sánchez, cree que las nuevas medidas adoptadas ayudan a que el sector "no acabe de hundirse", pero faltan las compensaciones económicas por las "pérdidas acumuladas".

Sánchez ha considerado que este "no es el mejor ni el peor escenario" para los hosteleros. "Nosotros siempre hemos trasladado al Gobierno vasco qué el sector quiere trabajar y que eran necesarias unas condiciones mínimas para poder trabajar en una situación mínima. Se acerca a los que nosotros establecimos como mínimo, pero no es la mejor de las opciones", ha asegurado.

¿Y LOS BARES SIN TERRAZA?

El representante de la asociación de hostelería vizcaina ha destacado "la desventaja" que suponen las medidas para los establecimientos que no tienen terraza, aunque ha recordado que, en estas fechas y con la actual climatología, muchos días tampoco será posible estar en ellas. También ha subrayado la desventaja de los locales pequeños.

A su juicio, hay que demostrar "que la cosa funciona, que se puede compaginar la actividad económica y la salud", y que estas directrices se vayan flexibilizando.

"GANAS Y NECESIDAD"

Héctor Sánchez cree que el sábado abrirá sus puertas un porcentaje alto de establecimientos hosteleros porque "la gente tiene ganas y necesidad". "Son fechas en las que históricamente la Navidad es un punto fuerte en la facturación de la hostelería y seguro que será un momento importante en cuanto a actividad. Esperemos que sea así y que la mayoría de los hosteleros que abran, manteniendo las medidas de precaución, puedan trabajar de la mejor manera posible", ha añadido.

Tras asegurar que el sector está "muy tocado, no hundido, pero casi", ha indicado que la decisión del Gobierno Vasco "ayuda a que no se acabe de hundir, pero todavía falta mucho". "Falta la compensación de todo este tiempo que hemos estado cerrados, de todas las pérdidas que se han acumulado y las que se van a seguir acumulando porque las limitaciones son muy importantes", ha asegurado.