bilbao - A pesar de que con los tratamientos disponibles en la actualidad la mayor parte de los pacientes asmáticos podrían estar controlados y llevar prácticamente una vida normal, factores como la falta de diagnóstico o de la adherencia a la medicación lo impiden. Como consecuencia, miles de asmáticos están mal controlados. Los datos de la Sociedad Española de Neurología y Cirugía Torácica (Separ), con motivo del Día Mundial del Asma que se conmemora hoy, advierten de que hasta un 60 o 70% de los asmáticos no tienen bien controlada su patología. La cifra no es baladí, ya que solo en el Estado esta patología respiratoria afecta a un 5% de la población adulta, siendo más prevalente en mujeres, y al 10% de los niños y adolescentes.

Al no estar bien controlada la enfermedad, se estima que cerca del 2% de los ingresos en hospitales son debidos a crisis asmáticas y un 80% de estos son evitables con el tratamiento preciso. En este sentido, el doctor Francisco Javier Álvarez, coordinador del Área de Asma de Separ, considera que “es necesario concienciar a los pacientes de que el asma es una enfermedad crónica y que como tal el cumplimiento del tratamiento es fundamental para el control de la dolencia y que el paciente pueda tener una mayor calidad de vida”.

Más allá de los tratamientos antiinflamatorios y broncodilatadores los neumólogos disponen actualmente de otras terapias, como la inmunoterapia o los tratamientos monoclonales que aplicados al asma y en los pacientes bien seleccionados permiten ayudar a los asmáticos a controlar mejor su asma y disminuir los ataques a la enfermedad.

la inmunoterapia Los especialistas reconocen que se tienen que plantear que la inmunoterapia es un tratamiento más para los pacientes con clínica de rinitis y asma, ya que desde hace poco tiempo ya disponen de evidencias científicas que demuestran el beneficio de este tratamiento en pacientes con patología alérgica no controlada con la medicación habitual.

Desde la Separ sostienen que la inmunoterapia es especialmente eficaz en los pacientes con rinitis o asma cuya causa sea alérgica y que debido a la intensidad de los síntomas no se controla bien con la medicación habitual. “Estos tratamientos son especialmente beneficiosos para pacientes jóvenes que comienzan a experimentar muchos síntomas nasales y conjuntivales. Son tratamientos largos que tienen pocos efectos adversos y que mejoran los síntomas de la rinitis y, sobre todo, del asma, disminuyendo las exacerbaciones del asma, al tiempo que permiten rebajar la medicación”.

monoclonales En pacientes con asma grave cuando la enfermedad no se controla con broncodilatadores y corticoides inhalados a dosis elevadas, la neumóloga Rocío García, también miembro del área de Asma de la Separ, se refiere a los tratamientos monoclonales. “Están recomendados en pacientes con deterioro de la función pulmonar a pesar de tratamiento con glucocorticoides inhalados a dosis elevadas y broncodilatadores”.

El presidente de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (Seaic), Javier Domínguez, reveló que el asma es el segundo motivo de consulta entre los pacientes que acuden por primera vez a una consulta de alergología.

Con motivo del Día Mundial del Asma, la Seaic puso de manifiesto la necesidad de que pacientes y alergólogos se enfrenten a la patología de manera cooperativa. “Los afectados no deben solo limitarse a recibir el tratamiento prescrito, sino que han de asumir su patología y ser conscientes de la importancia del cumplimiento del tratamiento de mantenimiento, independientemente de tener o no síntomas”, recuerda Domínguez.

actividad física Por otro lado, Boehringer Ingelheim ha lanzado una serie de vídeos en el marco de su campaña #ActúayRespira para concienciar sobre la compatibilidad entre asma y actividad física. Porque los expertos lo tienen claro: “Si el asma está bien controlado, la realización de actividad física no solo es segura, sino que mejora la calidad de vida de los pacientes”. Sin embargo, la mitad de los pacientes con asma tienen la dolencia mal controlada.