Bilbao - Día 23 de la huelga en los colegios concertados y la brecha entre patronal y sindicatos está a punto de convertirse en una profunda sima. Tanto es así que la noticia del día no será que 107.000 estudiantes volverán a perder clase, ni que el profesorado -haga huelga o no- cargue a sus espaldas con un día de lucha más por la renovación de su convenio colectivo. La noticia del día será que no se producirá la reunión convocada por los sindicatos a la tarde en el Consejo de Relaciones Laborales (CRL). Todo indica que ni las patronales ni el Departamento de Educación acudirán a una cita que no obedece a la activación del servicio de mediación del CRL por parte de los sindicatos en respuesta a la solicitud de las familias, el Ararteko y la propia consejera de Educación, Cristina Uriarte. De hecho la portavoz de ELA, Miren Zubizarreta, confirmó ayer que ni han pedido una mediación ni tienen intención de pedirla. Es decir, las centrales pretenden forzar una reunión con la patronal y el Departamento de Educación en uno de los despachos de la sede del CRL, pero sin la intervención del CRL, lo cual ha provocado un sinfín de reacciones que van de la confusión al enfado.

Este importante detalle no pasó inadvertido la semana pasada a las tres federaciones de AMPA de los colegios concertados -Fecapp, Bidelagun y Fapae- que tildaron la convocatoria en el CRL de “cortina de humo” por parte de ELA, LAB, Steilas, CC.OO. y UGT. Y tampoco ha pasado inadvertido para la patronal mayoritaria del sector, que ayer no dudó en calificar la convocatoria de la reunión de “maniobra” sindical para “confundir a la opinión pública”. Y en un giro de guion originado precisamente por la previsible foto de las ausencias en el CRL, Kristau Eskola aprovechó ayer para colocar la pelota en el tejado de los sindicatos tras ofrecerles reabrir la Mesa de Negociación si estos desconvocan las huelgas previstas “de manera inminente”.

A falta de una respuesta sindical, el de ayer fue un día de contactos y declaraciones, pero no se dio un solo paso para desatascar un conflicto que se enfanga cada día más debido a la carrera por ganar la batalla de la imagen pública a la que se han lanzado tanto sindicatos como patronal. Como en las 21 jornadas de paro precedentes, cientos de docentes se echaron a la calle para reivindicar un nuevo convenio y recuperar el poder adquisitivo perdido la última década. La actividad de muchos colegios se vio alterada por la huelga, que tuvo un seguimiento dentro de la horquilla que va del 20% al 60%, según las versiones. En otros centros, como en San José Jesuitas de Durango, el día discurrió con absoluta normalidad después de que su plantilla decidiera en asamblea descolgarse de la huelga. Por su parte, las familias mantuvieron una reunión en Bilbao con los sindicatos. En definitiva, un día más de huelga en la concertada vasca y cero avances, más allá de declaraciones de parte.

Kristau Eskola justificó su portazo a la reunión porque los sindicatos “en ningún caso” contemplan la participación del CRL y “tan solo pretenden hacer uso de sus instalaciones y de sus siglas. Por tanto, no entendemos que se incluya al Departamento de Educación a la misma”. Kristau Eskola señaló que “nunca” se ha negado a una eventual mediación aunque “siempre” con una condición, que “participe la Administración, asumiendo el compromiso previo de poner los medios necesarios ante las hipotéticas conclusiones de la mediación”. Asimismo, exigió a los sindicatos que “no pretendan intoxicar y crear confusión en la sociedad para tapar su irresponsabilidad y su actuación en la Mesa de Negociación del convenio”.

Por su parte la representante de ELA, Miren Zubizarreta, reiteró que la solución al conflicto laboral pasa por que la patronal tenga voluntad “real” de negociación y haya una implicación “real” por parte de Educación en la búsqueda de una solución. Y según advirtió, “será complicado que si no hay contenidos tangibles se desconvoquen las huelgas”. Zubizarreta calificó asimismo de “inaceptable” y una “irresponsabilidad absoluta” que el Departamento de Educación no acuda al encuentro en el CRL. El Gabinete Uriarte no ha entrado a valorar ningún aspecto de esta reunión.