MADRID. Nelly Pérez lleva casi catorce años tratándose de un cáncer en las dos mamas que ha reaparecido una y otra vez, pero ella asegura que “con una metástasis se puede convivir” gracias a los diferentes tratamientos innovadores que recibe. Con motivo del Día Mundial contra el Cáncer, esta paciente deja constancia de su larga experiencia con esta enfermedad. Cuando su médico le comunicó el primer diagnóstico de cáncer con 35 años se asustó, pero una vez pasado el primer impacto afrontó con fuerza el proceso. Lo que no se esperaba es que a los ocho meses de acabar el primer tratamiento sufriera una metástasis, una recidiva local: el tumor reapareció y ahí sí que sintió el miedo de cerca “porque siempre se escucha que la metástasis es igual a muerte”. Y eso le preguntó al médico, si era la recta final, y la contestación fue: “No se sabe”.
La respuesta la dio el tratamiento porque lo superó, pero a los tres años vino la segunda metástasis. Ella enfrenta a las recaídas “con muchas fuerzas y ganas”, porque lo importante es cronificar la enfermedad. “Voy a poder contigo”, le dice al cáncer. Por eso, a esta mujer no le gusta escuchar cuando fallece alguien que “perdió la batalla contra el cáncer”. “La batalla contra el cáncer no se pierde el día que uno se va de esta vida. Se pierde -argumenta- cuando dejas que el cáncer te robe tus ilusiones y te quite las ganas de vivir”.