Uribe, Txorierri y Mungialdea continúan en manos del PNV. El partido jeltzale mantiene su hegemonía en prácticamente todos los municipios de estas comarcas, tanto en los más populasos como pueden ser Mungia, Erandio, Sondika o Zamudio, como en el resto. Así, en Maruri-Jatabe, por ejemplo, el PNV consiguió ayer seis concejales frente a los tres de EH Bildu. En Mungia, siguen a la cabeza con ocho ediles frente a los 5 de la coalición soberanista. En Sondika, el partido Naia Landa suma seis concejales frente a los 4 de Bildu y uno del PSE. En Loiu, Josu Andoni Begoña obtiene ocho concejales frente a los dos de EH Bildu y uno del PP. Los populares regresan al pleno de este Ayuntamiento y también logran un concejal en Laukiz, donde el PNV sigue a la cabeza con cinco asientos frente a los tres de EH Bildu.

En Gatika, todo está en el aire. El PNV ha ganado las elecciones con 4 concejales pero Gatika Talde Independientea ha logrado tres y EH Bildu, dos. Por su parte, el partido abertzale mantiene la Alcaldía de Bakio, con siete conccejales frente a los tres jeltzales.

Mientras tanto, en Erandio, la candidatura encabezada por Aitziber Oliban obtiene ocho representantes, uno menos que en las elecciones de 2019. Segunda fuerza es EH Bildu, con seis ediles. Los socialistas, por su parte, pierden uno y el PP entra de nuevo tras una legislatura ausente, con un edil. Elakrrekin mantiene dos. Así que Oliban afronta su segundo mandato con la firme idea de continuar con la regeneración urbana de la localidad. “Es uno de los hitos más importantes. Regeneración urbana desde lo estético y también desde lo físico e, incluso, para atender otros retos como la movilidad o el cambio climático. Es una regeneración ya palpable en Kossler, donde había una industria y ahora son varios edificios de viviendas, un parque, una plaza, bajos comerciales y aparcamientos. Y ese modelo de regeneración se hará extensivo a otros espacios del municipio. Tenemos un microejemplo en Pagoeta con Gernika, tendremos un ejemplo brutal en Caesa dentro de unos años, y es la misma operación pensada para la zona de Tartanga”, comentaba recientemente en estas páginas.

Mungia también seguirá en manos nacionalistas. Esta vez con Alaitz Erkoreka. “Entre las grandes líneas de nuestro programa electoral destacan un desarrollo urbanístico equitativo y sostenible del municipio; la mejora de la accesibilidad, avanzar en el impulso del binomio deporte-salud; el respaldo de los productos y establecimientos locales y por el trabajo conjunto con las empresas; y el impulso de las energías renovables”, aseguraba a este diario.