Durante la campaña electoral en los nervios están a flor de piel en las formaciones políticas. En un momento en el que los mensajes se miden al milímetro, Félix García, candidato a las Juntas Generales de Bizkaia por Escaños en Blanco/Aulki Zuriak, nos recibe en La Alhóndiga, sin cartelería electoral a su alrededor y sin cámaras captando cada uno de sus movimientos. García aparenta ser cualquier cosa menos un político. De hecho, a pesar de que se presenta para liderar el máximo órgano legislativo de Bizkaia, asegura que no es político.
“Nosotros no somos políticos profesionales, no cobramos por ello. Tampoco tenemos una ideología política concreta. Hay gente con un perfil conservador y otro completamente opuesto; somos muy transversales, ni siquiera en nuestras asambleas hablamos de nuestra propia ideología”, explica.
En un partido en el que el programa electoral tan solo consta de un punto –a saber, No tomar posesión del cargo–, acompañarle durante una jornada electoral es complicado ya que los actos y los mítines brillan por su ausencia. “Intentas hacer algo, pero de lunes a viernes no tienes demasiado espacio ni tiempo, así que le dedicas los fines de semana con los medios de que dispones que pueden ser muchas veces, a nivel económico, aportaciones personales”, relata García.
Cuenta que “hay años en los que tienes más tiempo, y otros en los que menos”. Teniendo que compaginar vida laboral y familiar con una campaña electoral, “competir con otros partidos es complicado”. Sin mítines ni grandes actos, Escaños en Blanco/Aulki Zuriak, ha dedicado en Bizkaia días contados a entregar folletos y su principal herramienta para llegar a la ciudadanía llamada a las elecciones de este 28-M es internet. “Una de las claves de la expansión es a través de redes sociales, es uno de los principales instrumentos para contactar y llegar al votante”, apunta.
Otros de los mecanismos que han desarrollado en esta campaña, es la creación de un código QR. “La gente hace la foto y el código les envía a nuestra web. A veces las fotografías las hacen claramente y otras veces lo hacen más disimuladamente y entran en la web”, relata Luis Mari Ormaetxea, que se presenta por el mismo partido pero en Araba, por la circunscripción de Gasteiz.
García explica que, en caso de conseguir un asiento como juntero “renunciaría a mi puesto en las Juntas, al salario y a todo lo que conlleva. La idea sería dejarlo vacío, he pedido el voto a gente que no quiere votar a ninguna de las opciones existentes y por ello no tiene mucho sentido que haya una persona en ese asiento”.
De esta manera, a través de esos asientos vacíos, Escaños en Blanco/Aulki Zuriak pretende visibilizar la voluntad de los electores que no están conformes con el sistema representativo vigente “y/o no se encuentran representados por ninguna de las formaciones políticas que concurren a las elecciones, formalizando así su opinión dentro de los parlamentos en igualdad de condiciones con el resto de votantes”, resumían ambos candidatos.
María Cruz Pascual es la aspirante de esta agrupación política a la Alcaldía de Bilbao y, a pesar de que este reportaje iba a contar con su presencia, tuvo que declinar la propuesta de participar por serle imposible compaginar su vida laboral, familiar y una campaña electoral. Las personas integradas en Escaños en Blanco consideran que ejercer de político y dedicar su día a día a una campaña no es rentable ya que ni ganan dinero con ello, ni lo ganarían en caso de llegar a las instituciones.
