El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha avisado este miércoles al Gobierno de que el cese de la hasta ahora directora del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Paz Esteban, no cierra la "crisis" del espionaje.

En la sesión de control en el Parlament, ha reclamado de nuevo transparencia, asunción de responsabilidades y garantía de no repetición: "Hasta que esto no pase, nadie puede dar ninguna crisis por matizada ni resuelta", ha dicho en respuesta a la pregunta del presidente de Junts en la cámara, Albert Batet.

Según Aragonès, se equivoca quién piense que la decisión de destituir a Esteban se acaba la depuración de responsabilidades que exigen, y ha asegurado que el Ejecutivo central está "lejos de cumplir" las demandas que le han puesto sobre la mesa.

Poco antes, Batet ha coincidido en que el cese de la directora del CNI no es suficiente, y tras añadir que no puede servir "como cabeza de turco", ha defendido ante Aragonès que no se puede dialogar con los que espían al independentismo, en sus palabras.

Por ello, el presidente de la Generalitat ha reiterado su exigencia de que se desclasifiquen las autorizaciones judiciales que permitieron dicho espionaje así como el resto de la información relacionada con este caso, y que se asuman "responsabilidades políticas".