Solo una semana después de su toma de posesión, Yolanda Díaz ya marca impronta con sus decisiones. Alterna su reivindicación de la figura de Pablo Iglesias con la demostración de que las cosas se pueden hacer de otra forma. De hecho, ya se hacen a su manera. Para empezar, ha diseñado una agenda propia que arrancó ayer con la reunión con el PNV en Bilbao, una decisión nada casual, y que previsiblemente seguirá con un encuentro con Esquerra dentro de la ronda que pretende mantener con los líderes de las formaciones que hicieron posible el Gobierno de coalición, precisamente para asegurarse que la legislatura perdure el tiempo estipulado.

La ministra de Trabajo y vicepresidenta tercera del Ejecutivo de Pedro Sánchez, llamada a convertirse en el faro de Unidas Podemos, ha fichado además a un nuevo jefe de gabinete de perfil político, incorporando a Josep Vendrell. Miembro de Iniciativa per Catalunya, coincidió con la gallega en el Congreso en la etapa en la que el político catalán fue diputado de En Comú Podem. Trabajador y discreto, características bien valoradas por la gallega para desenvolverse.

En paralelo, Díaz también tiene en gran consideración al nuevo equipo del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, el otro departamento en el que se han producido cambios recientemente. Es más, con la nueva ministra, la navarra Ione Belarra, guarda una muy buena relación, y también tiene línea directa con los secretarios de Estado Nacho Álvarez y Enrique Santiago, personas de su máxima confianza. En este ministerio seguirá trabajando también Juanma del Olmo, hasta ahora director de Estrategia y Comunicación y pieza clave en la vicepresidencia de Pablo Iglesias.

Dentro de la marejada en Podemos, Irene Montero seguirá ejerciendo un papel político relevante más allá de las funciones de su departamento, y acompañará a Yolanda Díaz para reforzar un liderazgo que ella misma llegó a proponer de puertas hacia dentro, al margen de formar parte de los equipos de negociación en asuntos de caché. Como su predecesor, Díaz también formará parte del Consejo de Seguridad Nacional (CSN) y de la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos de Inteligencia (CNI).