El PNV ha detectado un cambio positivo en la actitud de Pedro Sánchez tras avisar al presidente español de que su paciencia se agota. Los jeltzales han podido comprobar con hechos que su toque de atención ha funcionado, tal y como valoran desde Sabin Etxea. Creen que los compromisos pactados se están desbloqueando y recibiendo un impulso político, como ha sucedido con la confirmación de que el traspaso de prisiones llegará en abril, cuando ha sido históricamente un tabú para el Estado. La Junta de Seguridad para afinar la coordinación policial se convocará antes del verano tras permanecer en barbecho desde 2017, y se han adelantado las conversaciones sobre las transferencias de inmigración y trenes de cercanías.

El asunto más difícil y que va a requerir mayores esfuerzos es la transferencia del Ingreso Mínimo Vital, pendiente desde octubre, aunque también existe un compromiso del Gobierno español para desatar el nudo de inmediato y convocar una reunión entre la consejera de Autogobierno, Olatz Garamendi, y los ministros Iceta y Escrivá. Las dos últimas citas con ministros han marcado un punto de inflexión. El vicelehendakari Erkoreka recibía el martes el compromiso de la vicepresidenta Calvo con todos los traspasos, sin regatear en el Ingreso Mínimo Vital; y un día después, la consejera Garamendi amarraba con el ministro Iceta un compromiso con el traspaso completo e integral, sin que se quede en una encomienda de gestión que obligue a contar con la autorización del Gobierno español para tramitar las ayudas. Del cumplimiento de los acuerdos va a depender que Sánchez siga contando con los seis votos del PNV.

Fuentes de la Ejecutiva que dirige Andoni Ortuzar aseguran a DEIA que las reuniones han marchado bien y, aunque no creen que lo ideal sea funcionar a golpe de advertencia, constatan que su toque de atención “ha funcionado”. Por un lado, Sánchez ha tomado nota de que el PP ha cambiado su actitud hacia el PNV. Los populares habían borrado a los jeltzales de su agenda telefónica por la moción de censura que sentenció al expresidente Rajoy, pero en los últimos tiempos han comenzado a cortejar al PNV para la renovación de la cúpula de la radiotelevisión pública española, y para renovar el Consejo General del Poder Judicial incluyendo a un vocal de jurisdicción vasca (José Luis Núñez). En paralelo, la posibilidad de que se constituya otro Govern de ERC y JxCat en Catalunya añade incertidumbre a Sánchez en su relación con los republicanos catalanes en el Congreso de los Diputados. Los votos del PNV se perciben más que nunca por parte del PSOE como una garantía para que la legislatura dure. Con Catalunya en el aire, Sánchez no se puede permitir que el PNV rompa la baraja y escuche los cantos de sirena del PP.

El presidente español se ha asomado ya al abismo en dos votaciones y las salvó por la mínima. Y las votaciones tuvieron mucho de carambola y pura suerte porque acudieron a su rescarte partidos que no le darán estabilidad en el corto o medio plazo. Por un lado, Vox se abstuvo en el decreto de los fondos europeos (en este caso, el PNV sí votó a favor aunque no comparte la gestión recentralizadora), y por otro, JxCat respaldó la aprobación del decreto que incluía invasiones competenciales sobre el Ingreso Mínimo Vital (el PNV votó en contra porque desmonta el modelo vasco de protección social otorgando un papel participativo y no consultivo a las entidades del tercer sector, y además el decreto exige que sean de adscripción estatal). Sánchez vio entonces con una claridad insólita hasta la fecha que su mayoría parlamentaria está en la cuerda floja y que no puede dar por hecho el respaldo del PNV.

Además, que el Gobierno español de coalición PSOE-Unidas Podemos se hiciera de rogar en el cumplimiento del Estatuto de Gernika no beneficiaba a los socialistas vascos. La vicelehendakari segunda y líder del PSE, Idoia Mendia, ha proyectado públicamente que ella también está en el diálogo, con su reunión del jueves con el ministro Iceta, y hoy mismo con Escrivá.

contactos a nivel de partido

Los jeltzales creen que la situación se ha reconducido a través de los contactos con el Gobierno vasco, pero también con el PNV a nivel de partido. En ese contexto, el presidente de la Ejecutiva jeltzale, Andoni Ortuzar, quien precisamente el jueves estuvo en Madrid para participar en una entrevista de TVE, dijo que el Gobierno español ha estado al borde de perder votaciones, y que el IMV es determinante para el PNV y no acepta que el Estado “destroce” el modelo vasco. “Desde aquella votación se han puesto las pilas con el IMV y ha vuelto a estar sobre la mesa”, dijo, para añadir después que espera que todo se reconduzca. Ortuzar recordó que el PNV ha sacado adelante Presupuestos y estados de alarma y ha tenido una contribución determinante en la estabilidad, pero avisa de que hay cosas que no se le pueden exigir. Sobre el traspaso de prisiones, frente a quienes tratan de torpedearlo, aclaró que el Gobierno vasco desplegará un modelo para todos los presos, no enfocado en los de ETA, y con la finalidad de que cumplan con la justicia y sea posible la reinserción.

La consejera de Autogobierno, Olatz Garamendi, aseguró en Onda Vasca que tras su reunión con Iceta quiere pensar que “esto empieza a andar de otra manera, y nosotros vamos a poner todo nuestro empeño para ello”. Valoró que, tras el bloqueo en el IMV, “acordamos ponernos inmediatamente”, y aplaudió que se haya abierto a buscar una percha para estabilizar a los interinos, lo que supone un cambio de posición porque fue el Gobierno español quien recurrió la Ley vasca de Policía.

“Desde la votación del Ingreso Mínimo Vital, en el Gobierno español se han puesto las pilas”

Presidente del EBB del PNV

“Quiero pensar que esto empieza a andar de otra manera; vamos a poner todo nuestro empeño”

Consejera de Autogobierno