- Era cuestión de tiempo que, una vez aplazadas las elecciones vascas del 5 de abril por la crisis del coronavirus, la oposición abriera el debate sobre el control parlamentario al Gobierno vasco en esta extraña situación sin precedentes que se ha abierto para las próximas semanas. El Parlamento está disuelto por la convocatoria electoral. Lo sustituye la Diputación Permanente, un órgano en miniatura que únicamente se puede reunir para abordar cuestiones de urgencia que “no admiten aplazamiento”, tal y como dice el reglamento, pero al que partidos como EH Bildu y Elkarrekin Podemos quieren convertir ahora en un órgano de control regular que se reúna con periodicidad. En contraposición a este debate, el lehendakari aclaró ayer que su gobierno tiene abierto un canal de comunicación fluida con la oposición para garantizar el feedback y reforzar su obligación de rendir cuentas en esta crisis.

Urkullu explicó que la consejera de Salud, Nekane Murga, ha tenido dos reuniones con los grupos (fue anteayer cuando mantuvo la segunda, por vía telemática, y la primera tuvo lugar hace unos diez días, según las fuentes consultadas), y el propio Urkullu celebró el lunes una cumbre con los líderes de los partidos para decidir juntos la suspensión de las elecciones hasta que levante la declaración de emergencia. Al margen de este canal, el lehendakari no se cierra a acudir a la Diputación Permanente si quiere convocarlo puntualmente para ofrecer explicaciones en esta crisis, pero nada más puede decir por ahora porque no se ha aprobado de modo oficial ninguna petición. “Es competencia de los grupos”, admitió. De momento, lo que hay sobre la mesa es una petición de EH Bildu registrada anteayer para que el lehendakari dé explicaciones. El PP también lo pedirá. Tanto la coalición abertzale como el PP han registrado igualmente varias solicitudes de información por escrito para la consejera de Salud.

Urkullu ya compareció en la Diputación Permanente tras el derrumbe del vertedero de Zaldibar. Otra cuestión es que se planteen reuniones semanales. El reglamento establece que la Diputación Permanente ha de convocarse con un “orden del día”, y además se aclara que en él “solo podrán figurar aquellos asuntos que correspondan al pleno y no admitan aplazamiento”. Es la Mesa, oída la Junta de Portavoces, quien decide si la petición se ajusta a lo previsto. La Mesa de la Diputación Permanente tiene la misma composición que la del Parlamento: los socios de gobierno, PNV y PSE, tienen tres sillas frente a dos. En el pleno, hay un empate a once. Este órgano tampoco puede legislar, y así lo acaban de aclarar los servicios jurídicos del Gobierno al descartar que se aprobara una reforma exprés para aplazar las elecciones. El Ejecutivo, por su parte, en realidad se encuentra en plenas facultades y no es un gobierno en funciones, como sí sucede tras las elecciones.

Urkullu se pronunció a preguntas de los periodistas en una nueva comparecencia telemática, en un momento en que EH Bildu y Elkarrekin Podemos están presionando para dar a la Diputación Permanente el rango del Parlamento con un control periódico al Ejecutivo. Este discurso de la oposición deja algunas contradicciones en el aire. EH Bildu, por ejemplo, formó parte de los grupos que no acudieron para evitar contagios al pleno que se celebró el miércoles en el Congreso, donde Sánchez explicó el estado de alarma, pero pide habilitar la Diputación Permanente en Gasteiz, castigada por el virus. Supondría activar medidas telemáticas y plantearía más problemas logísticos que una mesa de partidos reducida.

El diálogo con el Gobierno existe estos días, aunque es evidente que para la oposición es más seductor el formato de la Diputación Permanente por su carácter público y su proyección en los medios de comunicación. El lehendakari y el PNV plantean una vía más discreta con el argumento de que mantiene la unidad. Andoni Ortuzar ya planteó dar continuidad a la mesa de partidos del lunes. No es un foro de poco calado, puesto que se citaron en él los principales representantes de los partidos al más alto nivel.

El propio coordinador general de EH Bildu, Arnaldo Otegi, pidió ayer en Radio Euskadi que se conformen mesas políticas y con agentes económicos y sociales, pero al mismo tiempo reivindicó la Diputación Permanente, a la que quiso dar el rango de “miniparlamento” y que active medidas. La presidenta en funciones del PP de la CAV, Amaya Fernández, pidió en declaraciones a Efe una comparecencia urgente del lehendakari para explicar las medidas económicas.

El lehendakari aclaró su posición en una comparencia institucional sobre el coronavirus, flanqueado por las consejeras Murga y Beltrán de Heredia. Urkullu pronunció una declaración para pedir la “implicación de cada persona” en esta crisis sanitaria. Como primer mensaje, aclaró que “este reto acaba de comenzar” y que se “debe persistir en esta línea”. El Gobierno vasco ha desplegado una batería de medidas económicas, y también pide responsabilidad a los ciudadanos para que respeten las medidas de aislamiento en sus domicilios para evitar el contagio, y que salgan únicamente para lo imprescindible (trabajar, hacer la compra o ir al médico). En un momento en que la Ertzaintza ha estrechado el control para asegurarse de que nadie recurra a la picaresca y realice una escapada en este puente, el lehendakari apeló a la ”colaboración, colaboración y colaboración” con la sociedad. “La implicación ciudadana es imprescindible, imprescindible respetar las normas y permanecer en casa. No podemos bajar la guardia. Debemos mantener el pulso. Remar todas y todos en la misma dirección. Sin excepción”, dijo.

Estos son los primeros días del aislamiento en casa, y el lehendakari es consciente de que, a medida que pase el tiempo, esta tarea se puede hacer cada vez más cuesta arriba. Por eso se detuvo en la “importancia de permanecer en casa, un esfuerzo personal y familiar que tiene un sentido de alto valor humano y social”. Tras reconocer la labor del Departamento de Salud y de Osakidetza, prometió “prestar especial atención a las personas más vulnerables y necesitadas”. Anunció un fondo para reforzar la atención a las personas en situación de exclusión y sin hogar, y la ampliación de la partida presupuestaria para las Ayudas de Emergencia Social. Para terminar, apeló al auzolana y al programa con Cruz Roja.

“La Diputación Permanente tiene que empezar a funcionar como miniparlamento”

Coordinador general de EH Bildu

“Debe dar explicaciones al legislativo. No iremos con críticas de antemano; seremos colaborativos”

Presidenta del PP de la CAV en funciones