- La Audiencia Nacional arrancó ayer el juicio contra el excoronel y exviceministro de Defensa de El Salvador Inocente Montano por su presunta participación en “la decisión, diseño o ejecución” del asesinato de cinco jesuitas españoles, entre ellos el religioso vasco Ignacio Ellacuría, en 1989 en el país centroamericano, hechos por los que se enfrenta a 150 años de cárcel.

La fecha para este juicio estaba ya señalada antes de que se decretara el estado de alarma el 14 de marzo y finalmente se ha mantenido, debido a que el ya septuagenario Montano se encuentra preso desde 2017 y su prisión provisional ha sido prorrogada hace unos meses, por lo que urge sentarle en el banquillo. El excoronel es el primer militar salvadoreño que responde ante la Justicia española por el asesinato de Ellacuría, entonces rector de la Universidad Centroamericana (UCA) e ideólogo de la Teología de la Liberación. La madrugada del 16 de noviembre de 1989, en medio de la mayor ofensiva insurgente registrada durante la guerra civil salvadoreña, un comando de soldados de élite ejecutó a los religiosos y dos mujeres, una trabajadora de la UCA y su hija de 16 años.

En la primera sesión de la vista oral sobre estos hechos en la Audiencia Nacional, dedicada a las cuestiones previas, el tribunal accedió a la petición de la defensa del exteniente del ejército salvadoreño René Yusshy Mendoza, miembro del batallón Atlácatl, ejecutor de los asesinatos, de declarar extinguida su responsabilidad penal por lo que su condición pasa ahora a ser la de testigo.

La Fiscalía reconoció que “ya han pasado sobradamente” los 20 años establecidos y que, por tanto, “procede declarar prescritos los delitos” mientras que las acusaciones se adhirieron a ella no sin antes subrayar que Yusshy “está reinsertado, tiene trabajo, no ha vuelto a delinquir, desde 2012 mostró su arrepentimiento y gracias a su colaboración se tienen elementos probatorios”. Y además, precisaron, “pidió y recibió perdón”.

Con esta decisión, Montano se queda como el único acusado en este procedimiento, en el que se enfrenta a 150 años de prisión por el asesinato de los cinco jesuitas. El excoronel Montano, que portaba como todos los participantes en la vista una mascarilla, siguió esta primera jornada del juicio casi sin pestañear desde el banquillo de los acusados. Tras la primera sesión de ayer, el juicio se reanudará mañana miércoles.

La Compañía de Jesús se mostró ayer satisfecha por la apertura del juicio en Madrid aunque lamentó que éste no se haya podido celebrar en El Salvador.