Nueva Delhi - Al menos 43 personas perdieron ayer la vida en un incendio que se declaró de madrugada en una fábrica de Nueva Delhi. Al menos otros 64 trabajadores resultaron heridos y fueron trasladados a tres hospitales de la capital, algunos en estado “muy grave”. “Hasta el momento hemos contado 42 fallecidos y 64 personas heridas, algunas muy graves, pero podría haber más”, confirmó el portavoz del departamento de bomberos de Nueva Delhi, Atul Garg, quién añadió que “la mayoría” de los fallecidos y heridos lo son por “el humo”.

El fuego se inició pasadas las cinco de la madrugada por causas aún desconocidas en una fábrica de la zona de Anaj Mandi, al oeste de Nueva Delhi, que entre otros artículos fabricaba bolsos, según los medios locales. “Muchos murieron por respirar el humo porque no se dieron cuenta del incendio ya que estaban durmiendo”, declaró Garg, quien agregó que “en India es común que algunos trabajadores duerman en los lugares en donde trabajan”, por lo que presumió que la mayoría de las víctimas son empleados de la fábrica.

La policía de Nueva Delhi detuvo en ayer al propietario de la fábrica.

Una portavoz de la policía, Monika Bhardwaj, informó a los medios de que el dueño, identificado como Rehan y “su gestor Furkan han sido arrestados. La policía también está interrogando a los dos hermanos de Rehan y estamos buscando a quienes dirigían la fábrica”.

“Con la información que tenemos, no hay posibilidad de recuperar más cuerpos”, agregó Bhardwaj. Los bomberos, que se desplazaron hasta el área de Anaj Mandi, al oeste de la capital india, rescataron con vida a 62 personas, 16 de ellas heridas, según señaló a Efe su portavoz, Atul Garg, quien agregó que la mayoría de las víctimas se vieron afectadas por la inhalación del humo. Aunque aún se investigan el origen de suceso, el ministro de Aviación Civil de la India, Hardeep Singh Puri, apuntó a que la “causa inicial del fuego” fue un “cortocircuito”. Desde el gobierno se anunció una ayuda ex gratia de 200.000 rupias (2.540 euros) para los familiares de los fallecidos. - Efe