LA PAZ. El presidente boliviano, Evo Morales, ha proclamado este miércoles su victoria en las controvertidas elecciones del domingo y ha denunciado que se está produciendo un intento de "golpe de Estado" en el país por parte de la derecha y con apoyo desde fuera del país.

En una declaración, ha agradecido a los bolivianos su "cuarta victoria consecutiva" que ha dicho haber logrado "democráticamente", dándose así por vencedor en primera vuelta de las presidenciales, según informan los medios locales.

Según el mandatario, "está en proceso un golpe de Estado" por parte de la "derecha con apoyo internacional". "Hasta ahora hemos aguantado y soportado con paciencia para evitar violencia", ha defendido Morales, que ha pedido a la derecha que "no sean responsables del enfrentamiento boliviano" y "no siembren odio".

En este sentido, ha reivindicado que se respete "el voto de los indígenas" y ha criticado el paro convocado por la oposición, que desde el domingo ha venido denunciando fraude después de que se paralizó el recuento de los votos durante horas. Según el presidente, el paro solo perjudicará los departamentos gobernados por la oposición. "No hay razón para un paro", ha recalcado.

Asimismo, el también candidato del Movimiento al Socialismo (MAS) ha hecho un llamamiento a la población, en particular a sus bases de apoyo, a "organizarse y prepararse" para "defender la democracia" que "ha costado sangre para recuperar".

"No vamos a entrar a la confrontación, será estado de emergencia, movilización pacífica y constitucional", ha recalcado el mandatario, primer presidente indígena de Bolivia, según informa el diario 'El Deber'.

El presidente se proclama así vencedor en primera vuelta pese a que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) aún no ha dado a conocer los resultados oficiales. En este sentido, ha dicho que está "casi segurísimo" de que con el recuento de votos en las áreas rurales se confirmará su victoria.

Según Morales, "el conteo del TREP --el recuento provisional-- dijo que ganamos, somos respetuosos al informe oficial que brindará el Tribunal Supremo Electoral". Para evitar un segundo asalto frente a su más directo rival, el opositor Carlos Mesa, Morales necesitaba imponerse con un margen de más de diez puntos de ventaja, algo que según los últimos datos oficiales no tenía.

En un hile de mensajes de Twitter publicado poco después, el presidente ha defendido que "es la cuarta elección consecutiva que ganamos democráticamente". "Nos impusimos con más de medio millón de votos al segundo y tenemos mayoría absoluta en diputados y senadores", ha reivindicado.

Según el presidente, su victoria obedece a que los bolivianos quieren continuar "con nuestro proceso de cambio que garantiza crecimiento y justicia social con equidad; por eso es imparable". Asimismo, ha reprochado a la oposición que "desconocer el voto de los sectores populares es actuar con racismo".