BILBAO - El jueves 1 de junio se nos fue no solo un gran amigo, también una gran persona. Nuestro “Txulo” (Jose Gambino), como nosotros le llamábamos, nos dejó siempre claro que no había otro como él.
Quienes le conocíamos sabíamos que era una persona de esas que dejan huella, un ser especial, con valores y principios éticos que defendía por encima de todo, y que hacía que todos le admirásemos y quisiéramos por ser como era: “sincero, integro, honesto, puro y cabezota” . Una persona inigualable que sin duda ha dejado el listón muy alto.
Gran amante de la aventura y gran profesional de la “espeleología” se fue una vez más a la cueva donde parece que se quedará para siempre.
“El Txulo”, nuestro amigo invencible , con más vidas que un gato y que nos hacía sentir tan seguros a su lado, nos ha dicho adiós demasiado pronto.
Él era un genio, capaz de conseguir lo imposible, de dejarnos sin palabras. Si alguien lo podía conseguir, ese era el “Txulo”. Era capaz de inventar cualquier artilugio y lo mejor de todo, funcionaba? Aún recordamos esa incubadora que hizo para los niños de colonias con el único fin de arrancarles una sonrisa mientras veían nacer unos polluelos.
Con ALAIKI compartimos un sueño, una forma de entender el futuro de un barrio, nuestro siempre amado Kabiezes.
Dedicamos mucho tiempo, muchas experiencias, muchos desencuentros? pero allí quedó tu esencia. Es por eso que todos los que compartimos ese tiempo contigo, tanto niños como monitores, te recordaremos con gran cariño, con gran respeto hacia todo lo que hacías y? te echaremos de menos.
Gracias “Txulo” por dejarnos acompañarte en todas tus experiencias. Gracias por ser un ejemplo a seguir y un referente en nuestras vidas.
Te has pasado media vida bajo tierra. Siempre buscando lo imposible de ver a los ojos de los demás. Una vez mas, como siempre, te has salido con la tuya, y es allí donde tendremos que ir nosotros a verte.
Sin duda, has dejado huella hasta el final, y nos has unido a todos una vez más.
Egun Handirarte Txulo!