Madrid - El Gobierno de Rajoy aprobó ayer la reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, que limita la instrucción judicial a seis o 18 meses y sustituye el término imputado por investigado en la fase de instrucción, que pasará a denominarse encausado tras el auto formal de acusación. El ministro de Justicia, Rafael Catalá, aseguró que se ha llegado a asociar a la figura de imputado a “preculpabilidad”. De este modo afirmó que el término “investigado” es “bastante más coherente” con la fase de investigación y permite “fortalecer la presunción de inocencia que lógicamente debe acompañar a cualquier ciudadano antes de una condena”. - Efe