bilbao. El guitarrista onubense Miguel de Vega el Niño Miguel falleció el pasado 23 de mayo a los 61 años en el hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva donde permanecía ingresado desde hacía un mes aquejado de neumonía y problemas intestinales. El estado de salud del artista empeoró hace unos días por lo que fue trasladado a la Unidad de Cuidados Intensivos donde permanecía sedado, informaron a Efe fuentes próximas a la familia.
El Niño Miguel, a pesar de la inconstancia de su carrera como consecuencia de su adicción a las drogas y la esquizofrenia que tenía diagnosticada, estaba considerado como uno de los grandes intérpretes del flamenco y en los años setenta su forma de tocar causó sensación.
Esa adicción fue la que lo llevó a deambular por las calles de la capital onubense, donde era frecuente verlo con su guitarra regalando a los ciudadanos la belleza y maestría de una música que interpretaba con tan solo tres cuerdas, por lo que también era conocido en la capital como el niño tres cuerdas.
Alejado por completo del circuito profesional, su actuación en marzo de 2005 en la Sala Joaquín Turina, dentro del ciclo Jueves Flamencos de Sevilla, supuso una de las pocas oportunidades que los aficionados tuvieron en años, de disfrutar de su guitarra, aunque de forma esporádica ofrecía actuaciones en locales de Huelva.
En 2010 ingresó en un centro residencial y asistencial en Tharsis (Huelva) para ser tratado y logró recuperarse, lo que posibilitó su reincorporación al mundo de la música en noviembre de 2011 con un espectáculo que ofreció en el Teatro Central de Sevilla en el que consiguió colgar el cartel de "no hay billetes".
su padre, el maestro Aprendió a tocar junto a su padre, el también guitarrista español Miguel el Tomate y siendo un niño ya le acompañaba en el canto en tabernas y las calles de Huelva.
Grabó dos discos con Universal, La guitarra del Niño Miguel y Diferente (en los estudios Philips donde grababa Paco de Lucía) reeditados en 1999 bajo el título Grabaciones históricas. El flamenco es universal. Niño Miguel, disco actualmente descatalogado. Se presentó pocas veces en los escenarios y de hecho, la III Bienal de Flamenco fue casi su despedida.
A la grandeza de las composiciones de este guitarrista, que en 1973 recibió el premio de honor del Concurso Nacional de Guitarra de la Peña Los Cernícalos de Jerez, han rendido tributo guitarristas como su sobrino Tomatito y Rafael Riqueni.
De su legado musical destacan piezas como el fandango Brisas de Huelva o el vals Lamento, transcritas bajo el título Guitarra gitana. El Niño Miguel.