20 años no es nada, aseguraba Gardel en su mítico tango. Pero, cuatro décadas … se antoja mucho tiempo, demasiado, para una afición que vive como ninguna otra sus colores y su sentimiento athleticzale.

La espera ha sido larga y ha llegado el momento de echar el resto, de demostrar el estrecho y pasional vínculo emocional que existe hacia un equipo y hacia sus colores. Porque ser del Athletic es un sentimiento único y auténtico que, incluso traspasa fronteras territoriales y autonómicas.

Ambientazo en Bilbao, a la espera de la gabarra

Ambientazo en Bilbao, a la espera de la gabarra Iker Gorbea

Así queda demostrado con ejemplos como el de José Manuel y Antonio, dos jerezanos integrantes de la Peña Athetic Club El Castillo de Sabiote, una población se unos 4.000 habitantes con 60 socios zurigorriak. “La Peña tiene ya 35 años, se creó tras esa época gloriosa en la que se ganó Liga y Copa y nosotros hemos crecido con este sentimiento”, relatan los amigos de 45 y 47 años. “Estuvimos viendo la final en Sevilla y teníamos cogido el vuelo para venir. Bilbao dese hace dos meses y medio. Sabíamos que esta vez lo íbamos a conseguir”. Y aquí están, con su amiga bilbaína Berta como anfitriona, ocupando desde las 8.50 horas un espacio privilegiado “en segunda fila ya” del puente del Ayuntamiento” dispuestos a ver la llegada de la gabarra y el desembarco de la plantilla con la Copa. “Comí la afición del Athletic no hay ninguna y, como parte de ella, nosotros teníamos que estar aquí. El ambiente, a estas horas, ya es impresionante”.

La Ría se va llenando de gente para ver la gabarra

La Ría se va llenando de gente para ver la gabarra Ibai Armentia

Te puede interesar:

Diego Pedro Sánchez Janobe es otro ejemplo de esta i descriptible pasión. De 73 años y natural de Tobarra, Albacete, tiene el ADN rojiblanco en su ser. “Soy del Athletic desde que me parió mi madre”, afirma con una sonrisa. “Mi padre fue herido en la guerra, durante la batalla del Ebro y le trajeron aquí para curar sus heridas, le trataron tan bien que se hizo del Athletic”, relata con la voz entrecortada de la emoción.

“Somos cuatro hermanos. Y cuatro hermanas y todos rojiblancos”, asevera con orgullo tras hacer “700 kilómetros con mi sobrino para vivir este momento. “He venido ya 12 vece., aquí solo recibo cariño. Llevo al Athletic en en corazón. Es lo más grande del mundo. Como esto no hay nada. Es único. Aúpa Atlhetic!”, grita con el puño en alto.