LA visita a un defenestrado Almería que continúa sin victorias en liga y que se quedó en inferioridad numérica el lunes en los primeros minutos del segundo tiempo estuvo a punto de terminar en tragedia para el Athletic. Un contragolpe de manual en los compases finales del choque desembocó en un mano a mano entre Unai Simón y Marezi, quien estrelló el balón contra el poste tras recibir un pase filtrado de Melero a la espalda de Ander Herrera y De Marcos. Fueron centrocampista y lateral quienes ejercieron de centrales de emergencia en la jugada al coger la acción fuera de zona a Yeray y Paredes, quien llegó a la carrera para tapar el posible pase a Embarba. Desde el centro del campo tuvo que resignarse a ver el desenlace de la película Yeray en el único lance del encuentro en el que la pareja de centrales del Athletic dejó sin protección a Unai Simón.
Ocurrió también al filo del descanso en un cabezazo a placer de Lozano que blocó el guardameta murgiarra, si bien la responsabilidad cabe adjudicársela a De Marcos al verse superado en la marca por el delantero hondureño, a quien tanto Paredes como Yeray mantuvieron a raya durante el resto del envite saliendo victoriosos de cada pugna individual. Bien sincronizados se mostraron ambos ante la ausencia por lesión de Vivian en su segunda alianza del curso como titulares, en la que volvieron a dejar la portería a cero como ocurriera en la jornada anterior ante el Mallorca en San Mamés.
Paredes, imponente en el juego aéreo y a ras de césped, confirmó su imparable crecimiento con otra notable actuación defensiva a la que cerca estuvo de poner el lazo con el que hubiera sido su segundo gol de la temporada. Lo evitó con una soberbia mano el portugués Maximiano, quien repelió sobre la línea un poderoso testarazo del de Arrigorriaga a la salida de un córner. A la altura de las circunstancias, dentro de la pobre imagen ofrecida por el colectivo, estuvo también Yeray en su regreso al once inicial tras salir desde el banquillo en la visita al Atlético en la ida de la semifinal de Copa. Titular por tercera jornada consecutiva en liga tras dejar atrás una lesión que le mantuvo fuera de combate entre octubre y enero, el de Barakaldo volvió a mostrarse expeditivo, concentrado y acertado en un puñado de envíos en largo que permitieron al Athletic ganar terreno anta la falta de lucidez en la combinación.
Ningún gol en contra se les computa a los bilbainos en las tres últimas citas ligueras con Yeray en el campo con sendos empates sin goles contra Cádiz y Almería a domicilio y goleada ante el Mallorca (4-0) en San Mamés. Son cuatro, en realidad, los partidos que enlaza el Athletic sin encajar al sellar también su portería frente al Atlético en Copa (0-1) en un partido de máxima exigencia que los de Ernesto Valverde sacaron adelante con unos soberbios Paredes y Vivian como pareja de centrales. Yeray, que entró desde el banquillo en el minuto 85 en el Metropolitano, respiró aliviado al ver cómo un penalti cometido sobre Morata se iba al limbo gracias a un fuera de juego previo.
No encontró la manera el Atlético de hincar el diente a los rojiblancos, que hicieron gala de una magnífica sincronización defensiva que se ha convertido en una constante en el transcurso de la temporada. En total son 12 porterías a cero en liga con Unai Simón y 4 en Copa con Julen Agirrezabala las que colecciona el Athletic, que no ha acusado en términos estadísticos la marcha de Iñigo Martínez al Barcelona, ni la ausencia de Yeray durante más de tres meses de competición.
REGULARIDAD
El eje central de la defensa, con Paredes esquivando en sus doce últimas apariciones en liga la quinta tarjeta amarilla del curso y la consiguiente sanción de un partido, puede considerarse la parcela más regular dentro del ecosistema de un equipo que ha bajado el pistón en los últimos encuentros en materia ofensiva, pero no así en defensa. A Vivian, inconmensurable en su cuarta campaña como león y con cuatro amarillas también a sus espaldas, se le espera de vuelta el próximo lunes contra el Girona en San Mamés, choque en el que el Athletic, que cuenta con el guardameta con más porterías a cero en las 24 jornadas de liga ya disputadas, intentará frenar a un rival que asoma diez puntos y tres puestos por encima en la clasificación. Goleado el pasado sábado en su visita al Real Madrid (4-0), el cuadro catalán emerge como siguiente desafío para la tropa de Ernesto Valverde, que puede presumir de máxima fiabilidad defensiva.
