bilbao - A pesar de que aún están en pleno rodaje, Bambú Producciones aspira a que sus apuestas para el próximo otoño -Bajo sospecha para Antena 3 y, sobre todo, Refugiados para La Sexta- puedan competir en la primera liga de las ficciones televisivas a nivel mundial. El productor Ramón Campos señala su voluntad de seguir avanzando en la realización de ficciones de calidad que puedan interesar en el extranjero tanto como aquí interesan las estadounidenses.
La suya es una de las productoras más solicitadas, ¿a qué se debe?
-Creo que parte del éxito de Bambú es haber aunado productos comerciales que llegan al gran público con un cuidado en la producción que hace que también gusten a la crítica.
¿Cómo definirían el nicho de mercado que han encontrado?
-En un principio, la productora se posicionó en las series que mezclaban melodrama y thriller y misterio. Ese fue el elemento diferencial que nos permitió encontrar un hueco. Ahora, cada vez más, estamos abriendo nuestras series a todos los géneros.
¿Qué ofrece Bambú Producciones frente a sus mayores competidores?
-En realidad no creo que ofrezcamos nada distinto, más allá de una forma diferente de contar las historias. No es una forma ni mejor ni peor que la de nuestros compañeros de Ida y Vuelta, Globomedia o Diagonal, sino que es distinta. Intentamos poner el sello Bambú en todo lo que hacemos y que sea identificativo.
‘Galerías Velvet’ fue el impulso para pensar en otros proyectos más ambiciosos, ¿también ha sido el estímulo para arriesgar más?
-El impulso ya lo teníamos cuando hicimos nuestra primera serie, Desaparecida. A partir de ahí siempre hemos intentado innovar. Guante Blanco, aunque no funcionó en audiencia, fue una serie con la que pretendimos contar algo distinto. Luego intentamos actualizar el melodrama con Gran Reserva y nos atrevimos con el género histórico con Hispania; pero la serie que realmente nos abrió las puertas del mercado internacional fue Gran Hotel.
Una tendencia creciente es la vocación internacional que muestran con ‘Refugiados’, ¿estamos ante la globalización de la ficción?
-Esperamos que Refugiados sea la primera de muchas series que se hagan en España para el mundo. El hecho de poder rodar en inglés para el mercado internacional hace que las expectativas sean mayores. Aun así, para nosotros es importante que la serie funcione en nuestro país. Solo así tendrá sentido para las cadenas españolas invertir en productos como éste.
‘Refugiados’ es, además, una serie con una duración menor. ¿Ayudará este hecho a que su acogida sea mejor en el mercado internacional?
-La mayoría de las series que hemos vendido al mercado internacional (Gran Hotel, Velvet?) han sido recortadas para que en la versión internacional duren 50 minutos por capítulo, por lo que en el extranjero no notarán la diferencia.
¿Hasta qué punto tienen su mirada puesta en la ficción que se genera en Estados Unidos?
-Todos miramos a EE.UU. como una de las cunas de la ficción. Sin embargo, cada vez más, nos damos cuenta de que en EE.UU. hacen buenas series pero también muchas malas; eso nos anima a luchar. Si quieres estar al día debes ver lo que se hace en Gran Bretaña, Francia, Alemania, Dinamarca?
En ‘Bajo sospecha’, Bambú vuelve a sus orígenes con el género policíaco. ¿El éxito de series internacionales del mismo género como ‘True Detective’ o ‘Fargo’ les ha animado?
-Este es uno de nuestros géneros preferidos desde que empezamos; nunca lo hemos abandonado. Pero es cierto que cuando una moda se instaura es más sencillo que las cadenas lo aprueben y eso es lo que ha pasado.
¿Qué puede adelantar de ‘Contranatura’, la serie que están escribiendo para FOX Television Studios?
-Al contrario que con Refugiados, Velvet o Bajo Sospecha, en Contranatura no somos los productores, sino que el estudio nos ha comprado el guion del capítulo piloto y ahora estamos a la espera de que den luz verde a la producción. Es un proceso lento.
?¿Y qué hay de ‘Ladrones del tiempo’? ¿Sigue adelante el proyecto?
-Seguimos adelante con Atresmedia en la búsqueda de financiación internacional. Es una superproducción que para que quede bien debe tener un presupuesto acorde. Hemos hecho algunos contactos y creemos que pronto podremos dar noticias.
La comedia es una de sus asignaturas pendientes, tratándose de un género ‘low cost’, ¿qué inconveniente le ven para atreverse con ella?
-Ninguno. Es una cuestión de tiempo que abordemos el género de la comedia, pero hasta ahora las series que nos han encargado se centraban en géneros en los que ya habíamos demostrado nuestra valía. Velvet es la antesala de la comedia en Bambú.
Aunque ahora mismo parecen estar inmersos en la ficción televisiva, ¿se han planteado en alguna ocasión producir programas de televisión?
-Claro. Esa es una línea de negocio que siempre hemos tenido en mente. Hace un año abrimos un departamento con la idea de empezar a desarrollar tanto formatos de entretenimiento como otros pensados para internet.
Como productores, ¿cómo viven las riñas televisivas que producen constantes cambios en la programación?
-Preferimos centrarnos en la producción de series y que sean las cadenas las que tomen las decisiones de programación. Nosotros somos los jugadores del equipo de fútbol y las cadenas los entrenadores. Ellos deciden cuándo sale uno al campo. No obstante, se sufre cuando ves que una de tus series va a enfrentarse con uno de los buques insignia de la cadena rival.
Atresmedia ha apostado fuerte por sus productos, ¿es una alianza indestructible o prefieren no casarse con ninguna cadena ni grupo?
-Atresmedia nos abrió sus puertas y nos sentimos muy cómodos trabajando con ellos. Aun así, este es un compromiso que se sella, por ambas partes, con cada proyecto que hacemos, pero sabiendo que nada es eterno.