bilbao. El FesTVal ha sido testigo del estreno del primer capítulo de Homicidios, la nueva producción de Telecinco que encabezan Eduardo Noriega y Celia Freijeiro y que la cadena tiene previsto emitir este mes de septiembre. El actor santanderino afirma estar "muy contento" con su regreso a la pantalla pequeña y reconoce que su personaje es un "bombón" al que se encuentra enganchado desde que los guiones le "atraparon" cuando comenzó a leerlos.
Su papel de Tomás Soller en 'Homicidios' supone su vuelta a la televisión. ¿Qué le indujo a aceptar el papel?
Sobre todo los guiones. Tuve oportunidad de leer unos cuantos guiones antes de empezar a rodar y la verdad es que no quería dejar de leer en ningún momento, enseguida me atrapó la trama. La investigación envuelve la trama principal de la serie, que es la persecución de un asesino en serie. Tiene mucha intriga, muchas sospechas respecto a los personajes en la investigación... Además está la historia de amor de los dos protagonistas: Eva Hernández, la inspectora, y Tomás, el psicólogo.
Desde que terminó su participación en 'Colegio mayor' no había trabajado en la pequeña pantalla. ¿Por qué esta situación? ¿Se centró más en el cine?
Yo tampoco elegí empezar a hacer cine. Entré casi por casualidad, en cortometrajes, en vídeos, luego en cine y también di con Alejandro Amenábar. Tuve muchísima suerte. Empezaron a llamarme directores y empalmé un proyecto con otro. La dinámica de cine, aunque también te ofrecen proyectos a largo plazo, es diferente. Tú te lo preparas por tu cuenta pero es una fecha muy acotada. Sin embargo, cuando te ofrecen una serie de televisión, no me planteaba estar dos años con un proyecto o dejar de hacer otras películas en cine porque eran incompatibles con la televisión. A veces, era una cuestión de fechas, pero en este caso se ha podido y los guiones me entusiasmaron desde el principio. Estoy muy contento.
¿Ahora se plantea estar dos años en el mismo papel?
Primero me planteo estar uno. Luego veremos qué ocurre. Veremos si la serie engancha o qué pasa. Me gustaría hacer una película en julio, partir en dos y así no abandonar de todo el cine. Pero estoy mentalizado para hacer dos temporadas.
¿Cómo definiría a su personaje?
Tomás Soller es un psicólogo que está colaborando con la policía. El caso es que la policía sigue el protocolo ordinario pero la forma de investigar de Soller es más intuitiva. Va más por libre, quizá tenga un componente de anarquía o canallesco. Es muy obsesivo, muy trabajador. Y eso hace que la policía no pueda dejar de contar con él. Para algunas cosas le parece un desastre e incluso peligroso para la investigación. Pero, por el otro lado, es uno de los especialistas en España en trastornos de la conducta. Además, Eva tiene una pareja estable pero al investigar y trabajar junto a Soller hace que todo se revuelva, en todos los sentidos.
¿Cómo se ha preparado el papel?
Sobre todo la documentación que tienes que hacer es más específica en lo que él es especialista, que es en los trastornos de la conducta, de la psicopatología. Obviamente, en nueve meses no me voy a hacer una carrera pero sí que puedes documentarte sobre lo que estás grabando. Cada vez que aparece un texto de psicología o psicopatología, hay un trabajo de investigación exhaustivo. Es un trabajo que he hecho junto con el guionista, leyendo libros de psicología. Y sobre todo en los trastornos en los que está especializado mi personaje.
¿Ha finalizado ya el rodaje de la primera temporada?
Acabamos de concluir el rodaje del capítulo once y estamos en el sexto mes de rodaje. Todavía nos queda un mes para concluir los episodios doce y trece. La verdad es que el volumen de trabajo es mucho mayor que en el cine porque ruedas más cantidad de páginas y secuencias que en cine, aunque utiliza dos cámaras que eso también agiliza el trabajo. Ya me he acoplado a la dinámica de televisión y estoy muy contento con el resultado.
Las tramas policíacas suelen funcionar bastante bien en televisión. ¿Ha influido a la hora de elegir el personaje?
No. A mí me interesa el personaje y la trama. No elijo los personajes por si son más atractivos para el público o no. Elijo lo que es atractivo para mí en ese momento y Tomás Soller es un personajazo, un bombón.
¿Teme que haya comparaciones con otras series como 'Bones' o 'El mentalista'?
Ya han empezado las comparaciones en internet sobre esta serie y todavía no la han visto. No soy muy bueno dando referencias porque no he visto ni Bones ni Mentes criminales. Por lo visto tiene alguna característica en común con El mentalista porque hay un colaborador externo que trabaja con la policía intentando atrapar a un asesino en serie. Aparte de ese esquema principal, luego la trama no tiene nada que ver.
¿Tiene algún objetivo marcado con esta serie?
No. Mi objetivo es hacer bien mi trabajo, hacer un personaje interesante, creíble. Aportar todo lo que pueda desde mi posición de actor. Intentar darle credibilidad. Luego ya es la cadena que lo programa y el público el que decide si le gusta o no le gusta. Eso ya no depende de mí.
¿Ha notado las diferencias entre un rodaje para televisión y uno para cine?
Sí, sobre todo en el ritmo de rodaje porque se va más rápido en televisión. También la duración. Llevo siete meses rodando con un personaje mientras que en cine estás dos. También la autoría está más dispersa aquí. En cine está muy claro quién es el director mientras que aquí hay una producción ejecutiva muy potente, guionistas, los realizadores que se turnan por capítulos. La autoría está más dispersa y es un trabajo más en conjunto.