El peeling químico aporta a la piel bondades apreciables a simple vista, como la luminosidad y viveza. En sentido literal, consiste en pelar o decapar, y en dermocosmética es la técnica que produce una renovación celular acelerada de las capas de la piel con fines tan diversos como limpieza, nutrición, hidratación, astringencia, disminución de los efectos del envejecimiento, acción antiseborreica, despigmentación, etc. Por sus resultados tan satisfactorios es uno de los tratamientos más demandados en los centros de estética. Hoy en día, el peeling químico está considerado como "una buena opción, poco invasiva, que ayuda a mantener una piel sana, cosméticamente bella, y que inhibe los efectos del envejecimiento", tal y como explica Cristina Marín, directora de Teringel Belleza. Se hace sobre todo en la cara y las manos, pero también puede aplicarse en el resto del cuerpo, aunque es menos habitual.

USOS Y TIPOS El peeling químico es un tratamiento muy efectivo en sí mismo, pero "se emplea también como complemento o paso básico de cara a preparar la piel para otros procedimientos dermocosméticos, como la mesoterapia virtual", subrayan en este centro de estética de Barakaldo. Sus más de 40 años de trayectoria avalan el buen hacer de Teringel Belleza, que cuenta con extensa experiencia aplicando el peeling químico. Dependiendo de la profundidad de acción de la sustancia utilizada, el peeling puede ser superficial, medio o profundo. El superficial produce una destrucción del estrato córneo y parcial de la epidermis. El medio provoca una destrucción total de la epidermis y total o parcial de la dermis papilar. Por último, el peeling profundo induce a una destrucción total de la epidermis y de la dermis hasta el estrato reticular medio.

EFICACIA La eficacia del peeling depende de múltiples factores, como el conocimiento de la sustancia química que se va a emplear, las características de la piel (fototipo, grosor, herencia, hipersensibilidad, etc.), la formulación de cada sustancia (concentración, pH...), tiempo de contacto, etc. Según Teringel Belleza, la selección del peeling depende en gran medida del fototipo de piel de cada persona. Los fototipos bajos son los que mejor toleran la aplicación de agentes químicos, mientras que los altos son los que se irritan con mayor facilidad.

CLAVES Los aspectos importantes del peeling químico son la concentración de los activos, el pH del peeling y la textura del mismo. En Teringel Belleza disponen de una gran cantidad de peelings químicos para solucionar todo tipo de problemas en la piel (acné, manchas, arrugas, marcas, flacidez...). Con estos tratamientos se puede hacer vida normal, ya que son todos tamponados. Además, se realizan previo diagnóstico tras una primera consulta gratuita y sin compromiso. Para lucir una piel perfecta, este tratamiento es idóneo en cualquier época del año, recomendando el uso de protección solar si se efectúa en verano. Y es apto para cualquier persona, hombres y mujeres. La técnica del peeling químico ha evolucionado en gran medida, a partir del glicólico, que era el único que existía antaño. Este peeling es superficial, utilizado para contribuir a la reparación del fotodaño cutáneo. Por su parte, se recurría al salicílico para problemas de granitos, manchas, etc., pero "aquellos peelings no trabajaban tan profundo como los de ahora", explica Cristina Marín. Actualmente, para el tratamiento del fotoenvejecimiento, la pigmentación irregular y el acné inflamatorio no quístico se utiliza el mandélico, igual que para preparar la piel en tratamientos pre y posláser. En cualquier caso, cada tipo de peeling requiere determinado número de sesiones y en ocasiones es suficiente solo con una. En Teringel analizarán cada problema y recomendarán el más adecuado.