Uno de los pueblos más bonitos de España que merece la pena sin ninguna duda una escapada está entre la Sierra de Xortà y Serrella, la Sierra de Aitana y la Sierra de Bernia, en el interior de la provincia de Alicante y a tiro de piedra de la mítica Benidorm, meca del turismo de playa y uno de los destinos más visitados del país por turistas de todo género, edad, nacionalidad y condición.
Esta fascinante localidad de origen medieval está encaramada en un risco de casi seiscientos metros de altura, lo que le dota de un encanto particular y un innegable encanto.
Guadalest se encuentra situado en la comarca de La Marina Baixa, a menos de media hora en coche de Altea o Benidorm, y es un importante reclamo para el turismo de interior gracias a su famoso Castell (castillo), la torre campanario de su iglesia que emerge de un agudo peñasco y las vistas sobre las sierras que lo rodean y sobre el río y el pantano del mismo nombre que lo bordea.
El topónimo en valenciano, y oficial, es El Castell de Guadalest, la otra denominación con la que se conoce a este municipio que no llega a los trescientos habitantes censados está dividida en dos zonas claramente diferenciadas.
Para acceder a la zona más visitada del pueblo debes atravesar un angosto túnel peatonal horadado en la roca de la montaña sobre la que está construido el castillo de San José tras recorrer algunas de las emblemáticas calles empedradas que te retrotraen a épocas medievales y sus casas perfectamente encajadas en la roca.
La localidad tiene dos zonas claramente delimitadas. El barrio del Castillo, situado en lo alto de la peña y rodeado por las murallas del castillo; y el barrio del Arrabal, que se formó posteriormente al extenderse los asentamientos por la falda de la montaña.
Sorprende también la existencia en este escarpado y encantador pueblo la existencia de ocho museos de diferente temática: la casa Orduña; el Museo de Antonio Marco o Museo Belén y Casitas de muñecas; el Museo de Microminiaturas; el Museo Microgigante; el Museo Histórico Medieval; el Museo de vehículos históricos Vall de Guadalest; el Museo de Saleros y Pimenteros y el Museo Etnológico.
Una oferta museística para satisfacer a todos gustos y públicos y con la que puedes entretenerte y pasar una amena jornada contemplando curiosidades y piezas históricas.
El castillo de San José está situado sobre una gran roca en la parte más alta del pueblo y data del siglo XI, cuando fue base de las tropas musulmanas de la región anterior a la reconquista por su estratégica posición.
Los terremotos de 1644 y 1748 y la voladura que sufrió en 1708 en la Guerra de Sucesión fueron los culpables de su casi total destrucción, por lo que actualmente sólo están en pie algunos zonas amuralladas y una torre en ruinas.
A destacar también la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Asunción, un edificio barroco del siglo XVIII situado en la parte antigua del pueblo, justo al lado de la Casa de los Orduña y construido entre 1740 y 1753.
El senderismo y turismo de naturaleza es otro de sus atractivos. Las dos principales rutas son la PR-CV-19 de Guadalest a Castell de Castells, una ruta de 13,6 kms que transcurre por la presa, bordea el pantano y asciende al pueblo de Castell.
La otra es la PR-CV-18 Guadalest-Penya Alta-Cumbre de Aixortà con 15,8 kms de extensión.
Además, se cuenta con varias rutas de gran interés paisajístico y de baja dificultad, como la Ruta por el Embalse de Guadalest, de unos 5 kilómetros, de ida y vuelta; y la Ruta circular por al Embalse, de unos 10 kms de recorrido.
Si decides disfrutar sólo del pueblo puedes hacer una parada relajante en alguna de sus fondas y bares. Y disfrutar de una Plaza Mayor única y con unas vistas semejantes: un gran mirador desde el que contemplar una de las postales más bellas de Alicante con las sierras cercanas y el embalse de Guadalest como protagonistas indiscutibles.
Para poder llegar a Castell de Guadalest se puede viajar desde Benidorm en la línea 16 del transporte público. Para llegar desde la ciudad desde la ciudad de Alicante, se debe coger un autobús hasta la ciudad de Benidorm y una vez allí viajar en la línea 16.
Todo turista que visite Guadalest y la provincia de Alicante, no se debe ir sin visitar otros pueblos impresionantes como Altea, Alcoy, Calpe o Denia.
