Este lunes, 17 de noviembre, se celebró la final de 'MasterChef Celebrity 10'. Una entrega en la que, como no podía ser de otra manera, las emociones estuvieron a flor de piel.

Juanjo y Torito sellan su tercera y cuarta posición en el Palacio de Miramar

La noche comenzó con Juanjo y Torito sellando su tercera y cuarta posición en la última prueba de exteriores, donde el talent culinario brindó un merecido homenaje a Martín Berasategui por sus 50 años de dedicación a la gastronomía. Y es que el donostiarra continúa siendo, a día de hoy, el cocinero español con más estrellas Michelin. Una prueba que se celebró, nada más y nada menos que, en el Palacio Miramar.

Un precioso lugar al que desde la revista Viajar se refieren de la siguiente manera: "construido en 1893 para la reina María Cristina, quien ocupó el trono de España durante casi diez años como reina regente. Esta obra es un ejemplo del auge de la ciudad como espacio de la alta sociedad. Este palacio, con sus extensos jardines y vistas sobre La Concha, muestra la influencia de la realeza en la transformación de San Sebastián. Se puede visitar de forma gratuita, y ofrece vistas panorámicas a la bahía de La Concha y a la playa de Ondarreta".

La navarra Mariló Montero se proclama ganadora tras criticar la "ideología de izquierdas de RTVE"

En la línea con lo que relataban desde RTVE, "Mariló Montero se llevó el trofeo tras un intenso duelo con Miguel Torres en el que ambos optaron por menús de gran complejidad con diferentes historias familiares de fondo". La de Estella ganó el trofeo del programa y los 75.000 euros de premio para su ONG, en este caso, la fundación española para el fomento de la investigación de la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA).

Todo ello dos meses después del polémico paso de la navarra por 'La Revuelta', visita que aprovechó "para defender la tauromaquia como 'arte y tradición', debatir con David Broncano sobre ideologíacriticar la programación de RTVE".

"En las valoraciones Mariló Montero estuvo acompañada por sus hijos Alberto y Rocío y sus respectivas parejas, mientras que Miguel sintió el calor de su pareja, Paula Echevarría, su hijo y su madre. Ambos apostaron por menús arriesgados de gran complejidad técnica que contaban su historia y su amor por la familia. Mariló rindió homenaje a los suyos con una propuesta exigente, ambicioso y técnicamente compleja, que ejecutó con maestría. Su entrante fue un homenaje a la huerta española y, especialmente, a la de su madre, creada y cultivada por su madre y su tío Luis para alimentar a toda la familia. Al principal lo bautizó como 'Besos', un plato de 'altísimo nivel' que aprendió del chef Mario Sandoval y que demuestra la mano que tiene en la cocina. El lomo de corzo Wellington estaba abrazado por un hojaldre, para representar el recuerdo de aquellos despertares con besos a sus hijos, Alberto y Rocío, cuando eran pequeños. Para terminar, 'Estrellas' se presentó como un original postre con algodón de azúcar estrellado para simbolizar aquellas noches en que se tumbaba, junto a sus hijos, en el jardín de la casa de Sanlúcar de Barrameda para buscar estrellas fugaces y sueños por cumplir. Además, impregnó la estancia con un perfume creado por ella misma de ginebra, bergamota, rosa, jazmín, agua de azahar, canela y vainilla, inspirado en las mismas notas del Shalimar, de Guerlain, el perfume que ha usado toda la vida y su tía Lola le traía desde Francia", detallaban desde el programa.