- Nadie sabe nada, el espacio de humor de Andreu Buenafuente y Berto Romero en el que la improvisación es la única regla inquebrantable, salta desde hoy de la Cadena SER y YouTube a las plataformas de streaming de la mano de HBO Max. Y lo hace “creciendo” con “más medios y más músculo” que les permite afrontar nuevos retos como, por ejemplo, programas especiales desde México DF, Buenos Aires o la isla canaria de La Palma, pero siempre conservando su esencia como “refugio de la comedia”. Un espacio “blindado y luminoso” dedicado a la comedia sencilla, cercana y espontánea en estos “tiempos de ruido y furia”.

Berto Romero señala haber conseguido “un espacio blindado intemporal. Y para mí es muy importante y también muy nuevo, porque siempre trabajé pegado a la actualidad en un programa diario, trompazo por aquí, uno que se ha enfadado, las redes... pero este es un espacio protegido donde la actualidad entra muy pocas veces”. Andreu Buenafuente destaca, por su parte, que una de las “fortalezas” de Nadie sabe nada consiste en que se trata de un programa en el que “es más importante contar que he dormido mal que el último exabrupto político”.

Y es que, en este formato que vive constantemente agarrado a la espontaneidad no hay líneas rojas ni temas tabú, pero no se busca la confrontación. “Aquí prima lo luminoso y más en estos tiempos de ruido, ira y furia. El ‘Nadie’ es otra cosa”, señala Buenafuente que, a pesar de ser consciente de que siempre habrá críticas, dice no notar otra cosa desde el otro lado en estos casi ya diez años de programa que “complicidad” y un “gran cariño”.

“Somos personas cárnicas, como decimos en el programa, y tenemos sentimientos, pero si me tengo que quedar con una nota media es la de cariño. Y es que si en otros formatos estás un poco en el alambre, aquí el que te compra va contigo, es tu compañero de viaje. Y el que no te compra... pues que no nos diga nada. Es algo que yo recomiendo, para la vida en general: Si no te gusta algo, cállate. Es un consejo que quiero dar”, remarca Andreu Buenafuente. Una postura que secunda Berto, con una curiosa y festivalera comparación: “Nadie está obligado tampoco a participar en la fiesta. Esta semana ha sido el Primavera Sound en Barcelona y yo no he ido. Pero no se me ocurre agarrar por las solapas a alguien que ha ido y gritarle: ‘No me parece bien, no ves que cada año es lo mismo, gente tocando en un escenario’”.

Y a la hora de echar la vista atrás y definir estos casi diez años de programa (nació en el año 2013), ambos coinciden en señalar que, además de un “refugio” y casi un “patio de recreo” frente a otros proyectos más cuidados pero menos disfrutables, Nadie sabe nada es “un ejercicio de destilado, de complicidad, de espontaneidad y de ritmo muy potente. Es casi un taller creativo, narrado radiofónicamente y ahora también televisado de dos cómicos que llegan a improvisar, a ver que encuentran. Incluso tiene algo circense, como si fuéramos dos equilibristas que en algún momento dado se caen, porque a veces lo intentamos y no sale”, explica Berto Romero.

Y dentro de ese ADN, “lo fundamental es la extraordinaria complicidad con la gente”, sentencia Andreu Buenafuente.

En esta nueva etapa, el espacio continuará con su mecánica habitual pero incorporando nuevos elementos que van desde ideas que tenían desde hace años “guardadas en el cajón”, y que ahora pueden llevar a cabo hasta programas especiales que realizarán en lugares como La Palma, Buenos Aires o México DF. Los dos cómicos insisten en que en este salto al streaming lo más importante para ellos era no solo “hacer crecer” el formato sino hacerlo manteniendo “la filosofía” tan singular del programa. “Fuimos muy pesados con eso de no traicionar el espíritu del Nadie sabe nada. Llevamos ya suficiente tiempo en esto para saber que cuando te dan más medios y te sofisticas puedes perder naturalidad”, asegura Buenafuente.

“Ha sido un ejercicio de equilibrio y de contención. Pero a la vez había que conseguir que esa contención no evitara que el programa pudiera crecer e identificar muy bien por dónde podía hacerlo para que el mayor presupuesto no matara nuestra mecánica”, explica Romero que ve esta nueva versión del Nadie sabe nada como “el punto intermedio” entre ese “nuevo lenguaje que se opone a la televisión tradicional” que es “un podcast desmontado, de garaje y casi ‘punky’” con un formato televisivo “con una forma muy pulida”. “Ahí, en el medio, estamos nosotros... o al menos lo vamos a intentar”, apostilla Buenafuente.

Producido por El Terrat , Nadie sabe nada se estrena conservando todas sus ventanas en las plataformas de radio en la Cadena SER y YouTube con periodicidad semanal y después de haberse convertido en el podcast más escuchado en 2020 y 2021 según Spotify.

“En el ‘Nadie’ prima lo luminoso y más en estos tiempos de ruido, ira y furia”

Cómico y presentador