Bilbao - El fiscal rebaja las penas pero sigue pidiendo cárcel para dos de los cuatro ertzainas a quienes acusa de detención ilegal de un individuo que en el juicio reconoció que, tras una trifulca en una discoteca, se puso “muy pesado” y que desobedeció las órdenes de los agentes.
En el juicio que se celebró ayer en la sección sexta de la Audiencia de Bizkaia y quedó visto para sentencia, la letrada de los cuatro acusados solicitó la libre absolución de sus patrocinados y dijo que la acusación se basa en un error ya reconocido al elaborar el atestado policial y que las penas “no se sostienen” por desorbitadas, a pesar de haber sido rebajada respecto a la inicial de 5 años de cárcel.
En concreto, el fiscal considera probado que los acusados cometieron un delito de detención ilegal de una persona y que, además, prolongaron innecesariamente y a sabiendas su situación de privación de libertad, por lo que pide para los dos agentes que procedieron al arresto una pena de 10 meses de multa a razón de 10 euros diarios y 9 años de inhabilitación absoluta. Además, reclama para el instructor jefe del atestado policial 3 años y seis meses de prisión, además de 5 años de inhabilitación, así como 3 años de cárcel y 4 de inhabilitación para otro de los agentes que intervino en el atestado.
Los hechos juzgados ocurrieron la noche del 12 de septiembre de 2015, cuando un hombre pidió a dos ertzainas en la calle que le acompañaran a una discoteca para reclamar los 10 euros que le habían cobrado de entrada ya que, después de protagonizar una discusión e insultar a su exmujer, el responsable de seguridad del local había decidido expulsarle del mismo. En su declaración Jesús D. dijo que había bebido “un poco” y que quería recuperar su dinero. Los agentes le comunicaron que no podían abandonar su tarea, idéntica respuesta que le ofrecieron los agentes de la Policía Local y en SOS Deiak, a donde llamó en dos ocasiones. El hombre siguió insistiendo y los ertzainas le pidieron que no obstaculizara su labor. Finalmente, el hombre fue arrestado por desobediencia grave a los agentes y pasó la noche en el calabozo.
Por su parte, los sindicatos de la Er-tzaintza advirtieron de que, con juicios como este, solo se perjudica a la seguridad ciudadana porque hará que los agentes “se lo piensen diez veces antes de actuar”. Por ello, los compañeros ertzainas pidieron que se paralice la actuación, que calificaron de “absurda y desproporcionada”. - Efe