Un testigo niega su relación con la droga del crimen de Basauri

Bilbao - El tercer ocupante de la furgoneta en la que Alex R. M., se desplazó el 2 de julio de 2012 al barrio Azbarren de Basauri a una presunta transacción de droga compareció ayer en la cuarta sesión del juicio que se sigue en la Audiencia Provincial de Bizkaia. L. A. negó la versión ofrecida por su compatriota D. L., -que está en Colombia-, a la Er-tzaintza, un testimonio clave según los investigadores, en el que le incrimina como responsable de conseguir el medio kilo de cocaína.

"No tengo nada que ver con este proceso, por eso estoy aquí", afirmó ante el jurado. Asimismo, indicó que la versión de D. L., se debe a que este hizo "un trato con la Ertzaintza para limpiarse de responsabilidad y poder marcharse a Colombia, echándome el marrón a mí". Durante su intervención, L. A. afirmó que D. L. le "engañó" sobre el tipo de sustancia que, presuntamente, portaban y también indicó que "era el primer día que salía con Alex R. M.". Cuestionado por la defensa, L. A. sostuvo que la víctima recogió de la furgoneta "un sobre" en la presunta transacción de droga en donde "no llevaba un arma".

Por otro lado, ayer también declaró la pareja del acusado, M. P., que le acogió en Valencia después de los hechos. M. P., confirmó que el acusado le llamó ese día "sobre las 23.30 horas" y que le dijo que "bajaba" a verle a Valencia, "porque nos estábamos conociendo", apuntó. Cuestionada sobre la repentina visita de madrugada, explicó que no le "extrañó porque los autobuses suelen llegar de noche". Sobre el arma que portaba su pareja durante la detención declaró que "no sabía nada de la pistola" al tiempo que afirmó que "desconocía que se drogara". Además, también compareció el hermano del acusado, A. G. G., aunque se negó a responder a diversas preguntas. A. G. G., afirmó que en julio de 2012 mantenía "una mala relación" con su hermano, que "era adicto a las drogas y le quitaba dinero a mi padre". El fiscal le mostró unas grabaciones telefónicas en las que su pareja entonces, E. G., le dice: "Yo no tengo nada que ver con lo que ha pasado, es mejor que lo dejemos dos semanas, no quiero verme metida en ningún lío", sobre las que indicó que su contenido se refería "a cosas de novios" y que no tenían relación con los hechos.