La generación de residuos en los hogares alcanzó las 22.699.200 toneladas el pasado año en el Estado y de estos, el 83,8% del total fueron residuos mezclados. Por eso, además de realizar una correcta separación de residuos para su posterior reciclaje, es importante destacar que es posible reciclar la basura en el propio hogar, dadas las grandes toneladas de desperdicios que se generan y reducir así la cantidad de residuos que llegan al vertedero.

Además de separar la basura correctamente para poder tirarla a los contenedores correspondientes, podemos reciclar o reutilizar la basura en casa. Y, ¿cómo hacerlo? Creando compost. Es el abono formado por la mezcla de residuos orgánicos fermentados y materias minerales. Según explican desde Ecoembes, el compost per se existe desde el nacimiento de las plantas verdes en la tierra. Cualquier vegetal que acabe en el suelo y se pudra con participación de oxígeno se transforma en composto. Sin embargo, el que no tiene la ayuda del oxígeno, se convierte en turba (carbón ligero de aspecto terroso y esponjoso) y finalmente en carbón por el efecto de la presión.

Y es que con los restos que se depositan en el contenedor marrón se puede hacer compost, biorresiduo que puede aprovecharse como fertilizante e incluso como generador de energía. Ecoembes ofrece algunos consejos para poder llevarlo a cabo y adaptarlo tanto en casa, como en las aulas o empresas.

Proceso del reciclaje orgánico

Una vez se recogen los residuos, es preciso llevarlos a una compostadora que puede ser individual o comunitaria. De hecho, es posible incluso hacerlo en el propio hogar. Para ello, solo hay que seguir un sencillo proceso, para "imitar" al de la naturaleza. Según apuntan desde Ecoembes, solo será necesario controlar los parámetros de temperatura, humedad y oxígeno. Así, después de seis a doce meses está listo para ser usado.

Al separarlo del resto, se reduce la cantidad de residuos que llegan al vertedero, se reducen los malos olores y se ahorra energía, ya que puede producirse de esta manera en forma de biogás. De momento, las zonas pioneras se encuentran en Madrid, pero pronto irá extendiéndose a más zonas y comunidades autónomas.

  1. Es importante saber dónde vamos a acumular los restos. Elegir un recipiente con posibilidad de cerrado es una buena opción. También es importante dónde va a estar el recipiente. Es preferible que sea un lugar cálido.
  2. Primero debe llenarse la capa de abajo del recipiente con una capa seca y leñosa, junto con algo de estiércol que sirva para fermentar.
  3. Primero debe llenarse la capa de abajo del recipiente con una capa seca y leñosa, junto con algo de estiércol que sirva para fermentar.
  4. Después habrá que removerlo y dejarlo reposar. Airearlo de vez en cuando y regarlo cuando esté seco será otro detalle a tener en cuenta.
  5. Varios meses después (ente 4 y 6), las capas inferiores estarán compostadas. Debería tener un color oscuro, textura suelta y un olor agradable.