Adiós a las bolsas bajo los ojos para ganar juventud y belleza

NO de los problemas estéticos más frecuentes son las bolsas que aparecen bajo los ojos afeando el rostro y avejentando el aspecto personal.

A partir de los 50 años son un mal común, tanto en hombres como en mujeres, al que ponen solución en Teringel Belleza de forma sencilla y sin cirugía ni sus efectos derivados. Las bolsas debajo de los ojos, denominadas edemas periorbitarios, constituyen un exceso de grasa o lípidos en esta zona.

Pueden ser de distintos tipos, tanto en hombres como en mujeres de cualquier edad, pero las más frecuentes son las producidas por la retención de líquidos, es decir, las de origen acuoso; las motivadas por la presencia de grasa localizada, esto es, un exceso de acumulación de tejido adiposo en esta zona; y las de tipo genético o hereditario. Las causas principales que las originan son muy numerosas, si bien entre las más comunes destacan el envejecimiento, debido a que los ligamentos bajo los ojos se debilitan y el tejido cae; y la quietud del sueño, que provoca ojos hinchados al despertar a consecuencia de que su sistema circulatorio se mueve más lentamente cuando se está durmiendo y deja el exceso de líquido debajo de los ojos.

De ahí que se recomiende dormir con la cabeza más alta que el cuerpo. Asimismo, pueden generar bolsas debajo de los ojos las cremas faciales inadecuadas, las alergias, el consumo de alimentos procesados, el exceso de ejercicio y la deficiencia de hierro, sin olvidar sustancias nocivas como el tabaco, alcohol, exceso de cafeína, etc. Con el tratamiento aplicado en este centro de estética de Barakaldo, con más de 40 años de experiencia, se puede hacer vida normal. En Teringel llevan a cabo una alternativa al quirófano para quienes buscan una solución sin someterse a una intervención quirúrgica ni correr el riesgo que ello conlleva ni el postoperatorio correspondiente que implica quedarse en casa por tener una inflamación importante y tomar medicamentos. “Al no haber bisturí ni agujas no es necesario uedarse en casa ni llevar gafas oscuras por tener el ojo rojo o inflamado, por ejemplo”, asegura Cristina Marín, directora del citado centro.

En Teringel realizan un diagnóstico previo para ver el tipo de bolsa de que se trata. A partir de ahí deciden el tratamiento para cada caso, la aparatología necesaria, el producto a utilizar, el recomendado para aplicarse en casa (gel descongestivo por la mañana y crema por la noche para tratar la zona), así como la regularidad del tratamiento, el precio del mismo y número de sesiones recomendadas. Los tratamientos, que se aplican en cabina, dependen del tipo de bolsa a tratar. A veces incluso se combinan varios y todos son indoloros.

El tratamiento puede ser láser, o bien se puede optar por un tipo de radiofrecuencia, o por una clase determinada de ultrasonidos y a veces también por el denominado nanopore. Este último está indicado cuando, aparte de líquido y grasa hay flacidez, con arrugas. No obstante, en cada caso se aplica un tratamiento específico, de forma totalmente personalizada. Hoy en día, la eliminación de las bolsas es más solicitada por hombres que por mujeres, siempre buscando “quitarse años de encima”, avanzan desde Teringel.

Además, no hay edad ara sentirse más bello. Si bien lo más habitual es tratarse a partir de los 50 años, en ocasiones, cuando las causas son genéticas, el tratamiento puede demandarse a más temprana edad. Así, para quienes no quieran meterse en quirófano ya no es necesario conformarse con ese problema que “avejenta enormemente y da aspecto de cansancio restando brillo a la mirada”. El abultamiento provoca la sensación de empequeñecer el ojo, con lo que “quitarse las bolsas es quitarse edad”, subrayan desde Teringel Belleza, donde la consulta es totalmente gratuita y sin compromiso.