El 7 de agosto de 1974, los ciudadanos de New York miraron asombrados al cielo cómo el joven francés Philippe Petit atravesaba la distancia que separaba las Torres Gemelas, subido en un cable que estaba suspendido a casi 500 metros de altura, y con la mera ayuda de una pértiga desmontable. Se trata de la mayor hazaña en la historia del funambulismo, una disciplina, la de mantener un equilibrio precario a gran altitud sin red de protección, en la que se ha acostumbrado a manejarse el Gobierno de coalición del PSOE y Unidas Podemos.

El último choque de placas tectónicas entre ambas formaciones se produjo en el Consejo de Gobierno del martes, a cuenta de la decisión de aumentar el gasto militar en Defensa, impulsada por el PSOE a rebufo de la cumbre de la OTAN celebrada en Madrid. La oposición frontal de Unidas Podemos a esta medida se visualizó en la petición de la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, de convocar la comisión de seguimiento del pacto entre ambas formaciones, al tiempo que criticó a los socialistas por no consensuar previamente esta medida.

Ayer miércoles fueron numerosos los ministros y dirigentes de ambas formaciones que siguieron pronunciándose al respecto, y el conjunto de sus declaraciones se puede resumir en dos líneas maestras: se mantienen firmes en sus posiciones a favor y en contra de incrementar el gasto militar hasta un 2% del PIB y, al mismo tiempo, no ponen en duda ni por un segundo la continuidad de su coalición, pese al machaque continuo de la oposición. Muy al contrario, reafirman su relevancia e incluso su fortaleza. De nuevo, el equilibrista atravesando las nubes mientras camina sobre un cable de acero.

Tras la tormenta, los máximos dirigentes de ambos partidos, Ione Belarra por parte de Podemos y Pedro Sánchez de los socialistas, coincidieron ayer miércoles en la presentación del plan para impulsar la Garantía Infantil, un programa europeo para luchar contra la exclusión social en los menores, a la que también acudieron las ministras de Igualdad, Irene Montero, y Sanidad, Carolina Darias. En su transcurso no hubo palabras explícitas sobre el último anticiclón que ha azotado su relación pero sí muchos gestos: besos afectuosos y muestras mutuas de agradecimiento en sus respectivos discursos.

Más elocuente fue la hiperactiva vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, quien pese a encontrarse en Roma se explayó asegurando que “nuestra coalición progresista es más imprescindible que nunca. Para dar un mensaje de tranquilidad a mi país, el presidente y yo vamos a buscar todas las fórmulas imaginativas sobre el presupuesto de Defensa”. “Lo que más me importa es que los españoles no sufran”, añadió tras reunirse con su homólogo italiano, Andrea Orlando, y con el comisario europeo de Empleo y Derechos Sociales, Nicolas Schmit.

Yolanda Díaz aseguró que en este momento es necesaria “más coalición que nunca” y que “ante retos gigantes hay que tener altura de gigantes”, por lo que la negociación para resolver esta disputa no se producirá “a través de los medios de comunicación”, garantizó. Emplazó a mantener un debate con “serenidad y ánimo de llegar a acuerdos” sobre los presupuestos estatales del año próximo. Así, reivindicó el derecho a reflexionar sobre la necesidad de duplicar el gasto en Defensa para llegar a 22.000 millones de euros, cuando el presupuesto de su departamento está en 30.000 millones y asume políticas como los ERTE o las prestaciones por desempleo.

Buscar soluciones

Por parte de la coalición morada, la ministra de Igualdad, Irene Montero, dijo que el Gobierno del PSOE y Unidas Podemos va a seguir adelante y que se tiene que “reorientar” el gasto público para que haya más inversión en sanidad, educación, dependencia e igualdad. Ione Belarra, ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, instó a trabajar para que el Ejecutivo se parezca lo máximo posible a las necesidades de los ciudadanos.

En el lado socialista se sucedieron los mensajes de normalidad, y así el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, aseguró que “claro que a veces tenemos visiones diferentes y no pasa nada porque las solucionamos como solucionamos todo: dialogando, sentándonos en la mesa, buscando soluciones y siempre nos ponemos de acuerdo”. “Nuestro objetivo es trabajar para la mayoría social de este país, proteger a las clases medias y trabajadoras”, apostilló. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, aseguró que el de Sánchez es “un Gobierno estable, un Gobierno fuerte”, y la ministra de Política Territorial y portavoz, Isabel Rodríguez, defendió que más allá de que los socios hablen entre ellos, es mejor explicar lo que hacen.

Viaje a NYC

“Violencia política”. La portavoz de Podemos, Isa Serra, acusó ayer a la derecha de intentar “ridiculizar e infantilizar” el viaje de la ministra de Igualdad, Irene Montero, junto a su equipo a Nueva York, y denunció que se trata de un ejemplo de “violencia política” contra las mujeres feministas. Arremetió contra la campaña de ‘fake news’ que intenta “pervertir la realidad” y dijo que “el problema no es que viajen los ministros sino que viaje Montero con un equipo de mujeres jóvenes feministas para hablar de derechos reproductivos”.