Pere Aragonès ha querido correr un tupido velo sobre las declaraciones que han molestado al PNV, aunque no ha llegado a retractarse ni cree que se haya producido una ofensa por su parte. ERC ha mantenido estos días y en diferentes entrevistas el mismo discurso sobre su propuesta de Concierto Económico a la catalana, es decir, ha vuelto a decir que una de sus singularidades sería la aportación al fondo de solidaridad con el Estado, como si Euskadi no lo hiciera ya. Pero el president de la Generalitat ha querido mostrar este lunes su “respeto” por el modelo vasco que permite a Euskadi recaudar y gestionar sus impuestos, tanto que quiere imitarlo en Catalunya. Eso sí, no cree que su gabinete haya cuestionado esa solidaridad y atribuye las declaraciones del candidato del PNV a la dinámica preelectoral, porque los vascos irán a votar el 21 de abril.

Aragonès tuvo la ocasión de referirse de manera expresa a este debate en un encuentro informativo con el Colegio de Economistas de Catalunya. Allí se le preguntó si le ha sorprendido la reacción del Gobierno vasco. “Respetamos su modelo, tanto que nos gustaría tenerlo nosotros. Probablemente algunos de los comentarios que se han hecho no tienen que ver con nuestra propuesta, sino con la dinámica electoral donde todo se mezcla un poco”, se limitó a decir. En otro momento, Aragonès había dicho que quiere un Concierto como el de la CAV y Nafarroa, “ni más ni menos”.

El PNV hizo saltar la liebre el miércoles, cuando su candidato Pradales pidió respeto para el Concierto y que no se cuestione su solidaridad. En ese momento, los jeltzales evitaron desatar una guerra con Aragonès para no torpedearle la propuesta, y atribuyeron ese cuestionamiento de una manera no muy directa y explícita a ERC. El PNV estaba más preocupado por las lecturas de determinados medios de comunicación catalanes y estatales, que recurrían a fuentes oficiales y aseguraban que el modelo catalán se inspira en el vasco “pero” con solidaridad, como si Euskadi no aportara ya un Cupo al Estado, algo que hace, además, en un porcentaje superior a su peso en población y PIB. 

Ya entonces, en algunos ámbitos se hablaba de que la consellera de Economía, Natàlia Mas, había generado un equívoco cuestionando el volumen de la aportación vasca al Estado. Los días han pasado, y la propia Mas repitió en una entrevista en El Periódico, cuando se le preguntó por las diferencias con el modelo vasco, que la propuesta catalana tiene “tres elementos bien claros”: “soberanía fiscal plena, lo que supone recaudar todos los impuestos”, un fondo para pagar aquellos servicios que presta el Estado, y “un fondo de equilibrio territorial”. Esas aportaciones también las hace Euskadi. Mientras pone el foco en esa aportación al Estado, la consellera sigue sin aclarar cuánto querría pagar Catalunya, y este lunes ha vuelto a decir que, “más allá de cifras, es un cambio de paradigma”. La sensación que queda en algunos ámbitos es que trata de buscar diferencias con Euskadi para evitar los ataques de los sectores contrarios al Concierto, que en pocas ocasiones parecen realmente informados sobre el detalle de este sistema.

Tirón de orejas a EH Bildu

Mientras tanto, el PNV ha cuestionado la respuesta de EH Bildu a estas palabras de sus socios en el Congreso. El candidato de la coalición abertzale, Pello Otxandiano, sí se refirió a este asunto la semana pasada en una entrevista, donde admitió brevemente que no comparte las palabras de ERC. El parlamentario del PNV Iñigo Iturrate les recriminó en Onda Vasca que no alcen la voz y su “silencio vergonzante”. Aragonès siguió diciendo este lunes que su propuesta no la plantean contra nadie y que otras comunidades podrían asumirla.