Eneko Andueza sacó a pasear ayer jueves el traje de batalla. Casi en puertas de la jornada de reflexión, el líder del PSE tiró de un discurso combativo contra el PNV, partido con el que gobierna en coalición en la mayoría de instituciones vascas, con ánimo de marcar perfil tras una campaña socialista de bajos vuelos. En concreto, el secretario general de esta formación se agarró para ello a la exigencia del Gobierno de Urkullu al Ejecutivo de Pedro Sánchez de completar el cronograma de transferencias pendientes, y es que Andueza sostiene que “si las competencias no vienen a Euskadi es porque tenemos el Estatuto de Autonomía actualizado”. “El PNV se ha emperrado en meter cuestiones que desde luego no contribuyen a la convivencia y estabilidad, son derivas a las que se suman el hecho de construir una Euskadi solo para nacionalistas”, manifestó en Onda Vasca el dirigente socialista.

“Da la sensación de que a Aitor Esteban le obsesiona este tema y creo que la gente se está empezando a cansar de ese papel de plañidera constante que tiene”, añadió, emplazando a los jeltzales a comportarse con “honestidad”. “Si con un partido se ha desarrollado el Estatuto y han venido competencias a Euskadi ha sido con el PSOE. Vale ya de usar ese comodín para meterse con el Gobierno de Madrid”, exigió Andueza, censurando a los nacionalistas por querer tapar con estas quejas su voto en contra de la reforma laboral y de la Ley de Vivienda. De paso, durante la entrevista trasladó a PNV y EH Bildu que no le busquen “en la bronca” porque están perdiendo el tiempo, ya que el PSE apuesta por “poner propuestas encima de la mesa y mejorar la calidad de vida de la ciudadanía”.

Andueza lamentó el fango en que se ha desarrollado la campaña y lo achaca a que dos partidos, PNV y EH Bildu, “están compitiendo entre sí en ver quién eleva más el tono”, afectando al ambiente en vez de prestarse a “rendir cuentas” de lo que han hecho durante esta legislatura. Por ello, cree que el PSE no debe contribuir para nada ni a esa bronca ni a esa competición” porque su sitio está “en mejorar la calidad de vida de la ciudadanía” y a contribuir al progreso y a cuestiones tan fundamentales como el poder adquisitivo de la gente, el refuerzo de los servicios públicos o poner en práctica políticas “muy necesarias” como las relativas a la salud mental, dar oportunidades a los jóvenes y contribuir a “mejorar el futuro” de las familias con niños, en tanto que su fuerza política, el PSE, es “una palanca de cambio y palanca transformadora de la sociedad”.

Interpelado al hilo de esto por la reedición de la coalición, cree que esa pregunta hay que hacérsela al PNV porque, en otras ocasiones, “han llegado acuerdos para arrebatar alcaldías al PSE”. “Nosotros desde luego tenemos muy claro que nuestro papel no es ni poner palos en las ruedas, ni contribuir a enredar absolutamente nada. Nuestro papel es el de construir”, matizó, a sabiendas de que pueden aflorar otras diferencias tras los comicios. “Hay una realidad que se puede contrastar y es que donde el PSE gobierna no cuentan con el PNV como aliado sino todo lo contrario”, ya que los jeltzales “se dedican a destruir, a poner palos en las ruedas porque están constantemente con su calculadora electoral”. El líder socialista afirmó que su partido nunca ha llegado a un acuerdo con EH Bildu para arrebatar ninguna alcaldía al PNV, mientras que el PNV “no puede decir lo mismo”. Cuestionado por si la estabilidad pasa por gobiernos con los mismos socios de coalición que en Lakua, Andueza precisó que la estabilidad “puede venir con gobiernos de coalición, con acuerdos puntuales y a través de muchas cosas”.

Predicción

En este contexto, se atrevió a vaticinar que el PSE ganará en Gasteiz y aguarda con “especial ilusión” los resultados en Santurtzi, Sestao, Trapagaran, Muskiz o Barakaldo, antiguamente la joya de la corona del PSE. Sobre las razones de haber perdido fuerza en Ezkerraldea, apuntó que “muchas veces las pugnas internas y determinadas cuestiones orgánicas hacen que se dé al traste con algunas alcaldías”, pero cree que ahora tienen “mucha fortaleza y una unidad interna envidiable” que otros partidos en esa zona no tienen, lo que contribuirá a que puedan tener “opciones de volver a recuperar esas alcaldías”. En relación a Irun, prefiere esperar a que la ciudadanía se pronuncie. La movilización puede ser importante para el crecimiento del PSE, que prefiere cerrar la campaña con un ataque al partido que le sujetó de la mano cuando peor pintaban las cosas para el socialismo vasco.