La poeta y novelista nicaragüense Gioconda Belli, una de las más de 300 personas despojadas de su nacionalidad por el Gobierno de Daniel Ortega, ha brindado su apoyo este domingo a Yolanda Díaz en el acto en el que esta ha hecho pública su candidatura a las elecciones generales con Sumar.

"Yo quisiera ser española para tener una líder como Yolanda Díaz, una líder para estos tiempos en los que sumar es clave", ha destacado al inicio de su discurso en el acto multitudinario celebrado en el polideportivo Magariños de Madrid.

Belli, que se ha referido a la actual vicepresidenta segunda del Ejecutivo como "la ciudadana", ha destacado especialmente su "capacidad de respetar el pensamiento de los demás".

"Vengo de un país donde ese respeto se ha perdido. Yo y más de 300 personas hemos sido despojados de nuestra nacionalidad. A 94 se nos han confiscado nuestras casas y se nos ha borrado de los registros civiles, acusados de traidores a la patria sin juicio ni pruebas", ha recordado sobre su propia situación.

En ese sentido, ha destacado la necesidad de "cuidar la democracia, que es como un delicado cristal que puede quebrarse en mil pedazos".

"A mí, que vengo de una experiencia política fallida, me conquistó desde el inicio la iniciativa de Sumar", ha declarado Belli, antes de opinar que "en la izquierda tenemos aún que aprender a sumar, la gradualidad de los cambios y dejar de ser sabelotodos", una frase que ha despertado muchos aplausos entre los congregados.

Esta escritora y feminista, además de luchadora contra la dictadura de Anastasio Somoza en el Frente Sandinista de Liberación Nacional, ha cerrado su intervención con un poema de su autoría dedicado especialmente a Díaz sobre "los porteadores de sueños" titulado "Consejos para la mujer fuerte".

"Si eres una mujer fuerte, protégete de las alimañas que querrán almorzar tu corazón. Usan todos los disfraces de los carnavales, de la tierra, se visten como culpas, oportunidades, como precios que hay que pagar. Te hurgan el alma, meten el barreno de sus miradas y llantos hasta lo más profundo del magma de tu esencia, no para alumbrarse con tu fuego, sino para apagar la pasión, la erudición de tus fantasías", le ha prevenido en esas líneas.

Belli ha concluido su poema con estas palabras: "Ampara, pero ampárate primero; guarda las distancias, constrúyete, cuídate, atesora tu poder, defiéndelo, hazlo por ti, te lo pido en nombre de todas nosotras".