Ante la ausencia de movimientos del Gobierno español para cumplir con las transferencias que recoge el Estatuto de Gernika, los socialistas vascos, compañeros de filas de Pedro Sánchez, están optando por quitar hierro a la situación y por negar que exista una decisión política para detener los traspasos. Atribuyen esta situación a las habituales dificultades técnicas que surgen en el proceso, y acusan al PNV de dramatizar y exagerar estas diferencias. Este argumentario llevó ayer al secretario general del PSE, Eneko Andueza, a interpretar que el PNV “quiere instrumentalizar la cuestión de los traspasos para hacer oposición al Gobierno de España”. “Me parece muy legítimo y respetable, pero no lo comparto, porque ellos mismos saben que se está trabajando con lealtad desde ambos gobiernos”, dijo en Herri Irratia-Radio Popular, para añadir que a él le gustaría hablar de una “relación de lealtad”.

La parálisis es ya palmaria en este proceso, y el lehendakari denunciaba hace unos días que ni siquiera se han activado los cinco grupos bilaterales para dialogar sobre las materias que ha puesto sobre la mesa la consejera Olatz Garamendi (autorizaciones iniciales de trabajo en migración, ordenación del litoral, meteorología, fondo de protección a la cinematografía y salvamento marítimo). El Gobierno español únicamente mantiene abierta la negociación sobre las líneas de tren de cercanías. El Gobierno vasco es de coalición entre el PNV y el PSE, lleva en su programa el cumplimiento del Estatuto, y este bloqueo no es tampoco plato de buen gusto para el socialismo vasco en puertas de las elecciones municipales y forales de mayo. Pero opta por restar trascendencia a esta situación.

Andueza reconoció que han pasado más de cuatro décadas sin que se cumpla el Estatuto de Gernika en su integridad, pero añadió que, “cuando redactas un Estatuto, muchas veces no eres consciente de las dificultades derivadas” de ese texto. Defendió que el PSOE quiere que las transferencias vengan “con garantía jurídica para que nadie pueda acudir al Tribunal Constitucional” a tumbar esas materias, en una alusión velada a la ofensiva del PP y Vox contra otros traspasos como el Ingreso Mínimo Vital o la competencia sobre los secretarios e interventores municipales. Pero esa misma ofensiva se da contra leyes u otras decisiones de Pedro Sánchez (la normativa sobre memoria democrática, educación, eutanasia...), y eso no ha frenado su mano a la hora de tomarlas.

“Estoy de acuerdo en que se nos puede hacer largo, pero preferimos que vengan bien, y no rápido y mal”, dijo Andueza. El líder del PSE aseguró sobre el PNV que “algunos utilizan estas cuestiones como arma arrojadiza”.

NUEVO ESTATUS

Preguntado sobre la posibilidad de reactivar el debate del nuevo estatus de autogobierno en el Parlamento, Andueza mantuvo el discurso de que, si alguien quiere plantear el debate, el PSE participará, pero no lo considera prioritario. Se temió que el PNV puede recuperarlo ante el ciclo electoral, y avisó de que no participará en proyectos soberanistas. l

“lealtad”

l Relación entre gobiernos. Andueza abundó en la tesis socialista de que, en realidad, existe una relación de lealtad entre los gobiernos vasco y español, y que únicamente hay dificultades que no son ninguna novedad. Aseguró que más vale que las transferencias lleguen bien “y no rápido y mal”.